miércoles, 18 de noviembre de 2015

DE PERROS Y FLAMENCOS

Este articulo, que he descubierto hoy, en realidad es de hace un año, pero como las fotos son bonitas, la causa es bonita y si puedo le hago algo (un poquito) de propaganda a la Fundación, pues aquí lo tenéisDisfrutadlo.



Los amigos no se compran; se adoptan. Es sólo uno de los lemas que pregona la Fundación Benjamin Mehnert, organización sin ánimo de lucro que dedica todos sus esfuerzos al rescate, recuperación y puesta en adopción de animales abandonados para ayudarles a olvidar su triste pasado, principalmente galgos, aunque todos tienen cabida.
Como demuestra la exposición 'Cánidos, Embrujo y Duende' que, aprovechando los días de la Bienal de Flamenco en Sevilla, ya se puede contemplar en la Avenida de la Constitución, en el tramo cercano a Plaza Nueva, en la que doce artistas flamencos han prestado su imagen para fotografíarse junto a los perros.
La iniciativa fue idea de Alexandra Hoffer, quien lleva veinte años trabajando en la Fundación Cristina Heeren y es una apasionada de los animales. Tras visitar la sede de esta fundación, en Montequinto, conoció la historia de una perra galgo que había sido tiroteada, y que murió por el camino hacia el centro veterinario con el que cuentan. Habían llegado tarde. Y decidió que tenía que hacer algo.
Más de 600 perros se encuentran en sus instalaciones recuperándose física y psicológicamente tras haber sido torturados, maltratados y abandonados por personas que se deshacen de ellos cruelmente.


Algunos de estos canes estuvieron presentes en la inauguración de la muestra, haciendo las delicias de los viandantes y de los propios artistas que componen la serie. Por poner algunos ejemplos, tras la visita al centro, Miguel Poveda ha adoptado un perro. E Israel Galván, que aceptó aun teniendo miedo a estos animales, terminó el día tirado en el suelo con uno de los perros encima.
Casta, Georgina, Brian, Clara, Benji, Chana, Truhán, Berta, Diego, Coco, Cake, Gabriel, Ángel, Ocaso, Café, Leo y Lennon se han convertido en estrellas por unos días, aunque la fundación lucha para que tanto ellos como los demás perros de su refugio pueden ser brillar de felicidad durante todas sus vidas.
Junto a ellos, Arcángel, Estrella Morente, José de la Tomasa, Rocío Márquez, Farruquito, Milagros Menjíbar, Rubén Olmo, Niño de Pura, Manuel Lombo y Eva la Yerbabuena, además de Poveda y Galván. Todos ellos protagonizan las imágenes en blanco y negro realizadas por Nicolás Haro, doce en total, con las que, además, se ha realizado un calendario del año 2015 que se vende por 10 euros en los stands de merchandising ubicados en los espectáculos de la Bienal, además de en la propia web de la Fundación Benjamin Mehnert (www.fundacionbm.com), cuyos beneficios íntegros van destinados a esta causa.


En España se abandonan, maltratan y sacrifican más de 150.000 perros al año, y son alrededor de 1.000 los animales que pasan anualmente por esta Fundación, que tiene su sede principal en Sevilla y cuenta con otra en Madrid, logrando que se adopten alrededor de 800 cada año.
Pero todo esta labor de recogida de animales, su alimentación, tratamientos para las enfermedades y heridas, análisis, medicamentos, esterilizaciones, mantenimiento del centro veterinario, sueldos de los trabajadores que saben cuándo entran pero no a qué hora saldrán ... Todo ello supone un enorme gasto que, hasta el momento tan sólo se solventa a duras penas con donaciones privadas y el apoyo de la presidente de la fundación, Gisela Mehnert, que es quien aporta la mayoría.
Pero es algo que tiene tiempo limitado, y por eso se necesitanrecursos propios para que esta gran labor continúe para siempre, según comentaba a EL MUNDO la directora de la fundación, Isabel Paiva, quien añadió que nunca han logrado obtener ni un solo euro de ninguna de las administraciones, ni Junta, ni Diputación ni Ayuntamiento. "Nosotros pedimos y nos apuntamos a todas las subvenciones, pero nunca nos han ayudado", asegura.
En cambio sí que cuentan con ayuda de asociaciones de países de Centroeuropa como Holanda, Bélgica, Francia, Italia, Suiza, Alemania o Dinamarca, en donde sí están sensibilizados con esta causa, además de particulares de España.


La fundación cuenta con algunos proyectos, como el educativo, con el que acercan los perros a colegios para concienciar a los niños desde pequeños, "pero esta actividad debería estar incluida en los programas educativos aunque fuera con una clase de una vez al mes, porque con una sola visita, pasa un año y a los niños se les olvida", demanda la directora.

Multas irrisorias
También desvela Paiva que a menudo descubren quién ha sido la persona maltratadora o que los ha abandonado, "pero da igual, porque les ponen multas irrisorias, y aun así se declaran insolventes, se quedan sin castigo. Además, me han comentado que todos los maltratadores de personas empezaron antes haciendo lo mismo con animales".
Isabel Paiva anunció también la celebración del III Paseo Canino, el próximo día 27, a partir de las 11.30 horas, en los Jardines de Cristina, a donde acudirán perros recuperados por la Fundación y está abierto a todo aquél que quiera acudir con su propio perro. El objetivo principal es "concienciar a toda la sociedad de una adopción responsable, porque los animales tienen necesidades y sentimientos, no son objetos, y son fieles y leales a sus dueños hasta la muerte", explica.


La Fundación Benjamin Mehnert inició su actividad en 2008 tras la construcción de su Centro de Recuperación de Animales, desde el que trabajan para toda España, un espacio que ocupa 20.000 metros cuadrados de los que 2.000 son construidos. Cuenta con quirófanos, laboratorio con Rayos X, clínica veterinaria, edificio de cuarentena, hospital, peluquería, treinta patios de recreo, aula educativa y albergue, entre otras necesidades, porque todo ello no son lujo, son una necesidad.
Y sus responsables recordaron que ya lo decían la Madre Teresa de Calcuta ("Si aprendemos a amar a los animales como se merecen, estaremos más cerca de Dios") y Mahatma Gandhi ("Un país, una civilización se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales").















Articulo publicado en El Mundo