jueves, 15 de diciembre de 2016

TUMORES MAMARIOS: PREVENCIÓN Y ACTUACIÓN



Son tumores de gran importancia por su incidencia. En las perras no castradas constituyen las neoplasias más frecuentes, y por su potencial gravedad que incluso puede amenazar la vida ya que más de la mitad son malignos.
La frecuencia en la perra no castrada, es la mayor de todas las especies domésticas y como dato comparativo, se presentan más del triple de veces que la prevalencia humana. Por otra parte, los pacientes que han tenido tumores benignos tienen mayor probabilidad de padecer tumores malignos.
Nos centraremos en los aspectos preventivos ¿Qué medidas podemos tomar para disminuir su incidencia? y ……..¿Cómo comportarnos si aparece un bultito mamario? Pues sí, existen medidas eficaces tanto para prevenir su aparición como otras que pueden ser tomadas a “tiempo” para evitar consecuencias graves como son las metástasis. 


Las perras no castradas tienen una incidencia siete veces mayor de presentar tumores mamarios, por ello recomendamos la ovariohisterectomia que realizada antes del segundo celo es más eficaz, aunque aún realizada más tardíamente tiene también efecto protector.
La alimentación tiene también mucha importancia. Se podría resumir en evitar la obesidad (también está relacionada con muchas enfermedades) y así mismo son muy importantes los componentes de la dieta y que esta sea equilibrada. 


 
Ya en las primeras consultas de cachorros, procuramos explicar a los propietarios todas estas medidas dentro de lo que llamamos programa preventivo de salud y enseñamos a estos como observar los principales signos de enfermedad y como realizar una exploración a su mascota que incluye la palpación completa de las cadenas mamarias.
Por nuestra parte en cada visita, dentro de la exploración clínica, realizamos la palpación minuciosa del tejido mamario para la detección precoz de posibles masas ya que esta es la medida más importante para evitar complicaciones.
 


Una vez detectado el nódulo, nuestra propuesta es desarrollar las medidas más eficaces para evitar el desarrollo de la enfermedad. Estas son en primer lugar, saber la estadificación es decir, en que momento del desarrollo de la enfermedad nos encontramos y cuanto más precozmente el bulto es detectado mejor pronóstico. Para ello realizamos una analítica general completa, exploración de los ganglios linfáticos incluyendo si es necesaria una biopsia AAF y realización de estudio radiológico. Una vez dado este primer paso previo, se propone la realización de la cirugía, realizando una exéresis amplia y llevando a cabo un diagnóstico citológico mediante la impronta de varios cortes de la lesión escindida, que incluye el estudio de sus márgenes para verificar la ausencia de células tumorales. El diagnóstico y estadificación son determinantes para decidir si son necesarias más medidas terapéuticas así como el tipo y frecuencia de las revisiones.
Actuando de esta manera, podemos afirmar que ha disminuido mucho la mortalidad por cáncer mamario.