Basset Hound
Este trastorno, por el que las extremidades son más cortas de lo que debieran, es más probable que lo sufran determinadas razas con mayor predisposición; de todas formas, buena parte de los perros que la tienen pueden vivir plenamente.
Cuando un perro tiene patas demasiado cortas, tanto que se podría afirmar que presenta enanismo, es muy probable que estemos ante un caso de acondroplasia canina. Se trata de una condición que se hereda y que puede afectar de forma más o menos grave a los animales que la padecen. Aquí te contamos todo lo que necesitas saber sobre el tema.
Razas predispuestas a sufrir este trastorno
Estamos ante una forma de osteocondrodisplasia provocada por una anomalía del gen receptor del factor de crecimiento de los fibroblastos. ¿Y esto cómo se traduce? En que los huesos del animal, indistintamente de su sexo, no crecen al tamaño esperado.
Pastor alemán afectado de acondroplasia
Hay algunas razas en las que los humanos han decidido que se manifieste este rasgo de extremidades cortas de forma permanente como parte de su fisonomía. Y es un tema que seguramente requiere un debate profundo, pero que excede a este artículo. Por ejemplo, es una condición que se busca en:
Basset hound
Corgi galés de Pembroke
Skye terrier
Teckel
Perros con patas cortas
Sin embargo, hay otros animales afectados por acondroplasia canina de forma no deseada ni buscada. Es el caso de:
Pastor u Ovejero Alemán
Boston terrier
Spaniel japonés o chin
Terrier escocés
Pointer inglés
Shih-tzu
Cocker spaniel
Beagle
Bulldog inglés y francés
Alaskan malamute
Pekinés
Lhasa apso
Shar pei
Perro maneto
Síntomas y enfermedades asociadas
Además de por las patas cortas y desproporcionadas, la acondroplasia canina se distingue por:
Cabeza alargada y más grande de lo habitual
Crecimiento óseo anormal y deformidades esqueléticas
Dientes torcidos
Mandíbula acortada
Deficiente crecimiento y desarrollo físico
Espina subdesarrollada
Extremidades arqueadas, sobre todo las delanteras
Corgi galés
Asimismo, este trastorno se suele asociar con otras dolencias. Entre ellas:
Sordera
Paladar hendido
Cardiopatías
Convulsiones
Artritis (a medida que el animal envejece)
Cómo se diagnostica la acondroplasia canina
Ante la sospecha de que un perro padece de acondroplasia, el veterinario deberá practicarle un examen físico completo para desechar otras causas del problema.
El mismo debe incluir pruebas de laboratorio. Por ejemplo: hemograma, perfil bioquímico y urianálisis. También es importante que se realicen radiografías de las extremidades afectadas y de la columna vertebral.
Tratamientos para perros con enanismo
De la gravedad con que la acondroplasia se manifieste dependerá el pronóstico para cada ejemplar. Para algunos canes puede resultar incapacitante, pero muchos perros, por suerte, logran llevar una vida sana y larga sin tener que ser sometidos a tratamiento alguno.
Otros animales necesitarán que se les suministre antiinflamatorios que alivien la presión o el dolor que sienten. En casos más extremos se deberá recurrir a la cirugía. Y es más que probable que la esperanza de vida se acorte.
Otro tema a tener en cuenta ante un caso de acondroplasia canina es que el can no se vuelva obeso. El veterinario sabrá indicar cuál es la dieta adecuada para evitar que el sobrepeso complique el cuadro.
En todo caso, se aconseja que antes de pensar en que un perro predispuesto a padecer este trastorno se reproduzca, se realice una evaluación genética del mismo. Lo mismo vale para padres, abuelos y hermanos del animal en cuestión.
Publicado en Misanimales