Las respuestas de David García Zamora y Raúl Opazo
son muy buenas, por eso me voy a enfocar en cómo ven los perros a los
humanos en general. Creo que nos ven como estímulos sociales
importantes. Por ejemplo, como modelos sociales. En un estudio del 2009,
publicado en Science por Topál y colaboradores exploraron el Error A no
B. Consiste en tener dos contenedores (A y B) con el perro
mirándote, escondes un juguete que le interese en el contenedor A y
dejas que busque, lo normal es que encuentre su juguete. Después repites
el mismo procedimiento dos veces más y en el tercer ensayo escondes
frente al perro el juguete en el otro contenedor (B). Lo que suele
ocurrir en perros (y niños) es que a pesar de que te ven poner el
juguete en el contenedor B lo buscan en el contenedor A. Los autores
concluyeron que los perros y niños interpretan los primeros ensayos como
un aprendizaje. Este estudio es interesante porque muestra que
espontáneamente los perros toman a los humanos como modelos de
aprendizaje social.
En
un estudio en el que participé encontramos que los perros presentan
actividad cerebral en el núcleo caudado (tradicionalmente vinculado al
procesamiento de recompensas) cuando observan la cara de un humano
desconocido . Es posible que los perros interpreten a los humanos de
forma similar a una recompensa. Una limitación de nuestro estudio es que
sólo participaron perros de familias. Aunque otro estudio encontró que
los perros que viven en albergues pasan más tiempo cerca de un humano
desconocido en comparación a perros de familias. Este estudio es muy
importante porque muestra que los perros adultos de albergues conservan
su capacidad y motivación para formar nuevos lazos, los autores
sugieren que la falta de contacto social humano puede incrementar la
motivación en los perros de albergues para interactuar con los humanos.
A
través del proceso de domesticación, los perros han adquirido
características que les permiten adaptarse al ambiente que comparten con
los humanos. Por ejemplo, los perros pueden discriminar entre caras de
humanos felices y contentos, pueden saber el estado atencional de un
humano por la dirección de su mirada, entienden las claves
comunicativas humanas e incluso a la combinación de significado y
entonación de las palabras.
Creo
que gracias a la investigación sobre la cognición de los perros, ahora
todos podemos saber lo que aquellos que tienen perros ya sabían, que los
perros realmente pueden ser nuestros mejores amigos. :)
Escrito por Laura V. Cuaya en The Huffington Post