lunes, 16 de abril de 2018

TU PERRO TE HABLA ¿SABES LO QUE DICE? 2ª PARTE, POR SERGIO A. OTAL ESCARTIN


Cuando nuestros cachorros pasan del año de vida, y si hemos las cosas medianamente bien, diremos el tópico de: “A mi perro sólo le falta hablar”. Pero realmente no le falta hablar, él esta todo el día hablando. Nuestro problema es que él se ha esforzado en estudiar nuestro lenguaje y expresiones, pero nosotros no hemos estudiado su lenguaje y además nos hemos empeñado en enseñarle el nuestro.
Esta demostrado que un perro medio es capaz de diferenciar entre 60 y 140 palabras.

Los perros, como todos los cánidos, se comunican a través de tres grandes grupos:
- Vocalizaciones
- Expresiones faciales
- Expresiones corporales

 

Esto sería como su forma de hablar.

Dentro de este primer grupo se distinguen fundamentalmente, otras 3: Ladrido y aullido, gemido y gruñido.

Las expresiones faciales son básicas, ya que sus músculos no están tan adaptados a la expresión como los nuestros.

Las expresiones corporales, junto a las vocalizaciones le dan un amplio vocabulario a nuestro perro, sería parte de su hablar. Algunas de ellas las hemos visto y ampliaremos en el posterior artículo.

A continuación os expongo los principales sonidos que podemos oír de nuestro animal al intentar comunicarse con nosotros o con otros perros, así como su posible significado y lo que intenta decirnos. Es su modo de hablar.




Ladridos: Son heredados de su antepasado el Lobo, pero éste sólo los usa en su etapa infantil, ya que de adulto usa el aullido. Sin embargo nuestro perro lo usa hasta la muerte, así parecen lobos que no han madurado.

Por su tono se clasifican en: Roncos o bajos, normales o medios y agudos o bajos.

Por su intensidad los clasificaremos en: Alta, media y baja.

Y por su timbre se clasifican en: Secos, prolongados y aullidos.

Cuando el perro quiere hacer una llamada de alerta, demostrando interés, realiza una serie de 3 ó 4 ladridos rápidos, a tono medio y sin pausas. Si son ladridos rápidos, a tono medio y sin pausas, es una señal de alerta, pero sin estar ansioso. Cuando estos ladridos ya son continuados, bajando el tono y la velocidad, es un ladrido de alarma que expresa preocupación y la sensación de peligro inminente. 



Cuando el perro esta encerrado, y quiere decirnos que necesita compañía, que esta aburrido, encadenará unos 4 ó 5 ladridos de tono medio, con pausas de 3 ó 4 segundos, secos y de intensidad baja. Suelen afectar a nuestra paciencia y a la de nuestros vecinos.
Si por el contrario quiere saludarnos, emite cadenas de 1 ó 2 ladridos agudos, secos y de intensidad alta.
Al emitir un único ladrido de tono alto, nos indica que algo le molesta, es posible que tu perro lo haga al despertarle de repente, tirarle del pelo,...
Si quiere llamar nuestra atención, para que le abramos una puerta, le demos comida,... es probable que realice un único ladrido seco, agudo y de intensidad, mirándote a ti y a la comida, o la puerta,...
Generalmente los ladridos de tono bajo indican dominancia y amenaza, el tono alto indica inseguridad y miedo. Y ladridos muy deprisa indican el estado de excitación y alerta que esta el animal.



Pero el perro todavía puede hablar más.

Aullidos: Si tu perro se siente aislado de tu familia o de su jauría, si la tiene, emitirá unos aullidos entrecortados finalizando en un último aullido prolongado.

Si realiza un aullido prolongado y sonoro, esta anunciando su presencia, reafirmando su territorio a grandes distancia. Como diciendo “estoy aquí!!”.

Cuando el animal esta triste y aislado, no se siente bien en ese lugar, quiere irse con los suyos,... emite un ladrido de aburrimiento para convertirse en un aullido suave y prolongado.



Gruñidos: Cuando el perro emite un gruñido suave y de tono bajo, nos esta indicando que lo dejemos tranquilo. Suele emitirlo un perro dominante cuando esta enfadado.

Si realiza un gruñido a tono bajo que se convierte en ladrido, nos esta solicitando ayuda. Trata de indicarnos que esta hasta las narices y que no le presionemos más.
El gruñido que se convierte en ladrido, de tono alto, lo realiza un perro asustado que no las tiene todas consigo. Ten cuidado es posible que se defienda.
Cuando muestra un gruñido que tiende a ronquido de baja intensidad y largo, nos esta indicando que se acabo, que se relaja definitivamente. Suele acompañarlo del acto de tumbarse en el suelo.



Gemidos: Al realizar gemidos suaves que se van elevando en tono, es posible que nos este pidiendo algo. Si estos gemidos son más fuertes y frecuentes, es por que la emoción asociado es mayor.

Cuando tu perro este excitado, esperando que le des su comida o llega su hora del paseo, emitirá unos gemidos que van disminuyendo su tono al final, como si te dijera “vamos, corre, deprisa,...”.
Los gemidos suaves, nos indica bien el dolor o bien que esta asustado.
Un chillido repentino, es como cuando tú dices “¡Ay!”, como respuesta a un dolor súbito. Lo realizan entre ellos, cuando acaban sus peleas, lo efectúa el que abandona la pelea por vencido.
Si realiza un serie de aullidos súbitos, la realizan los perros al ante el miedo o el dolor. Es posible que observes estos aullidos, cuando tu perro sale de una pelea.



Pero todavía puede hablar más.

Los jadeos, nos indican el stress del animal, su grado de excitación. A estos jadeos se acompañan unos signos faciales, el estiramiento hacia atrás de los labios (como si quisiera reírse). Cuando el jadeo es más relajado y los labios vuelven hacia delante, el perro esta liberando stress.
Los suspiros, nos indican el final de un acto. Pueden ser de contento si la acción ha sido satisfactoria, o marcando el final del esfuerzo si ha sido en un duro trabajo para él.
Los gritos (parecido a un niño llorando), las emitirá un animal como señal de pánico, esta temiendo por su vida.
Observe siempre la boca de su animal. Cuando el animal esta relajado, la boca no estará cerrada con fuerza, pero si él esta pensando, su boca estará siempre cerrada. Así al hablar usted a su perro, si esta con la boca cerrada lo esta escuchando. Si no solamente lo oye.



Todo es cuestión de paciencia, pero a lo largo del tiempo, verá como la comunicación con su perro es más fluida. Incluso se comunicará mejor que con uno de su misma especie, sino pruebe a hablar con un chino.







Sergio A. Otal Escartín
Veterinario y psicólogo canino
Cursos de comunicación animal