No es una historia más. Es muy común ver como las personas observan y fotografían a los animales -propios y ajenos- mientras realizan movimientos llamativos que exceden las capacidades comunes de su especie. Es parte del hobbie que comparte una gran cantidad de seres humanos en el mundo: retratar un momento único y compartirlo en las redes sociales.
Y así nació la fama de Tombili, un gato que se volvió una estrella en el distrito de Kadikoy, en Estambul (Turquía). Su relajada postura, acodado a los cordones de las veredas, llamaron la atención durante años de los turistas que descubrían a este personaje entre las calles turcas.
Yakup Yükseler -su dueño- logró que su imagen sea viral luego de publicarla una foto en su cuenta de Instagram. Utilizó ese espacio para exhibir otras fotografías de su mascota, demostrando cómo le gustaba descansar a Tombili.
Tombili falleció el 1 de agosto y ese fue el motivo por el cual la asociación de animales Anatolian Cat decidió esculpir al gato en su clásica postura. La estatua, diseñada por el escultor turco y amante de los animales Seval Sahin, inmortalizó su postura, que se asemeja a los parroquianos que se apoyan en la barra de un bar.
Los gatos se acercan para ver la estatua de Tombili
Inspirado en la foto que se hizo viral, Yakup Yükseler mandó a esculpir una figura a tamaño real de su gato en bronce, la cual fue colocada en la misma calle donde se tomó la imagen. Al ser a tamaño real, la escultura llamó la atención de otros gatos, que se acercaron para contemplar al felino inmortalizado.
"El objetivo es llamar a la gente a apreciar las relaciones con los gatos callejeros. Con suerte, esta hermosa escultura motivará a amar y respetar a los animales un poco más", explicaron desde Anatolian Cat.
"El objetivo es llamar a la gente a apreciar las relaciones con los gatos callejeros. Con suerte, esta hermosa escultura motivará a amar y respetar a los animales un poco más", explicaron desde Anatolian Cat.
La estatua fue inaugurada durante los primeros días de octubre de 2014 y en pocos días se habían acercado miles de personas a conocer la historia y a honrar la memoria de Tombili, entregando bebidas y comidas como ofrendas.