jueves, 4 de enero de 2024

LA PERSONALIDAD DEL PERRO CAMBIA CON LA EDAD


"Encontramos correlaciones en 3 áreas principales: edad y personalidad, en similitudes de personalidad entre humanos y perros; y en la influencia que la personalidad de un perro tiene sobre la calidad de su relación con su dueño"

Entrenamiento canino
"Los perros más viejos son mucho más difíciles de entrenar; descubrimos que el mejor momento para enseñar a un perro a obedecer es alrededor de los 6 años, cuando supera su etapa de cachorro excitable pero antes de que se establezca demasiado en su etapa adulta"


Cuando los que tienen un perro como compañero invierten tiempo rascándoles la barriga, sacándolos a dar largos paseos, o incluso cuando sienten una frustración constante por sus malos hábitos, gradualmente van configurando las personalidades de sus perros. Los perros, como las personas, tienen estados de ánimo y rasgos de personalidad que dan forma a cómo reaccionan en ciertas situaciones. Ahora, un nuevo estudio de la Universidad Estatal de Michigan, titulado Old dog, new tricks: Age differences in dog personality traits, associations with human personality traits, and links to important outcomes y publicado recientemente en la revista especializada Journal of Research in Personality revela que, como los humanos, las personalidades de los perros probablemente también cambian con el tiempo.


"Cuando los humanos pasan por grandes cambios en la vida, sus rasgos de personalidad pueden cambiar. Descubrimos que esto también ocurre con los perros, y en un grado sorprendentemente grande", declara William Chopik, profesor de psicología y autor principal del estudio. "Esperábamos que las personalidades de los perros fueran bastante estables porque estos no están sometidos a los enormes cambios en el estilo de vida a los que a veces nos vemos expuestos los seres humanos, pero en realidad cambian mucho. Descubrimos similitudes con sus dueños, el momento óptimo para el entrenamiento e incluso un momento de sus vidas en que pueden volverse más agresivos hacia otros animales ".

Chopik encontró además que conociendo las personalidades de los perros se pueden anticipar muchos aspectos importantes en la vida del animal. Por ejemplo, sus personalidades influirán en lo cerca que se sienten respecto a sus dueños, identificarán las probabilidades y patrones en los que un perro podría morder a otro perro o persona, e incluso podría predecir la aparición de enfermedades crónicas.


Los perros se parecen a sus dueños

La investigación, publicada en el Journal of Research in Personality es uno de los primeros, y el estudio más grande de este tipo realizado para examinar los cambios en las personalidades de los perros. Chopik encuestó a los dueños de más de 1.600 perros de 50 razas diferentes. Sus edades comprendían desde unas pocas semanas hasta los 15 años, y estaban divididos estrechamente entre machos y hembras. La extensa encuesta hizo que los propietarios evaluaran las personalidades de sus perros y respondieran preguntas sobre el historial de comportamiento del los mismos. Los propietarios también respondieron una encuesta sobre sus propias personalidades.

"Encontramos correlaciones en 3 áreas principales: edad y personalidad, en similitudes de personalidad entre humanos y perros y en la influencia que la personalidad de un perro tiene sobre la calidad de su relación con su dueño", afirma el investigador. "Los perros más viejos son mucho más difíciles de entrenar; descubrimos que el mejor momento para enseñar a un perro a obedecer es alrededor de los 6 años, cuando supera su etapa de cachorro excitable pero antes de que se establezca demasiado en su etapa adulta".


Un rasgo que rara vez cambia en edad con los perros, deaclara Chopik, fue el miedo y la ansiedad. Reafirmando el dicho de que "los perros se parecen a sus dueños", la investigación de Chopik mostró que canes y amos comparten rasgos de personalidad específicos. Los humanos extrovertidos calificaron a sus perros como más excitables y activos, mientras que los dueños con emociones negativas calificaron a sus perros como más temerosos, y menos receptivos al entrenamiento. Los propietarios que se calificaron a sí mismos como agradables calificaron a sus perros como menos temerosos y menos agresivos para las personas y los animales.

"Hay muchas cosas que podemos hacer con los perros, como las clases de obediencia y el entrenamiento, que no podemos hacer con las personas", añade Chopik. "La exposición a las clases de obediencia se asoció con rasgos de personalidad más positivos a lo largo de la vida del perro. Esto nos brinda oportunidades interesantes para examinar por qué la personalidad cambia en todo tipo de animales".


Los hallazgos de Chopik demuestran cuánto poder tienen los humanos para influir en la personalidad de un perro. Explica que ·muchas de las razones por las que los cambios en la personalidad de un perro son el resultado de la teoría de la "naturaleza contra la crianza" asociada con las personalidades de los humanos. En los próximos años , la investigación de Chopik examinará cómo los propietarios influyen en el cambio de comportamiento de los perros."Supongamos que adopta un perro de un refugio. Es probable que algunos rasgos estén ligados a la biología y sean resistentes al cambio. Sin embargo, si posteriormente colocan al animal en un nuevo entorno en el que es querido, el perro podría evolucionar hacia una nueva personalidad más relajada y tranquila y sociable ", dijo Chopik. "Ahora que sabemos que las personalidades de los perros pueden cambiar, queremos establecer una conexión sólida para comprender por qué los perros actúan, y cambian, de la forma en que lo hacen".






Publicado en NatGeo