“He estado locamente loca por los perros desde que era muy pequeña”, nos dijo cuando nos reunimos recientemente con el talentoso retratista de cachorros. “A cualquier edad, en cualquier momento de mi vida, si viera un perro caminando a mi lado por la calle, me derretiría (y todavía lo hago) en un charco de felicidad y adoración imposibles”.
Y es ese charco de felicidad y adoración el que luego vierte en su fotografía.
Y es ese charco de felicidad y adoración el que luego vierte en su fotografía.
"Mi objetivo es capturar esos pequeños momentos, aquellos en los que los perros existen tan bien y a través de los cuales expresan su alegría con tanta facilidad", explicó. "Mis imágenes son un reflejo de lo que siento exactamente por los perros cuando los miro: la intensidad, el color, la fantasía pura y sin adulterar".
No hay duda de que ha capturado ese capricho una y otra vez. Ya sea que esté fotografiando para clientes comerciales o privados, la marca “Dog Breath Photography” es prácticamente sinónimo de fantasía.