lunes, 5 de agosto de 2024

EVOLUCIÓN DE LOS NOMBRES DE NUESTROS PERROS A TRAVÉS DEL TIEMPO


Los nombres de los perros, al igual que los nombres humanos, han cambiado a lo largo de la historia, lo que refleja las actitudes humanas sobre sus queridos caninos de épocas pasadas. Aunque puede parecer un poco trivial considerar cómo nombraban a los perros hace siglos, en realidad es bastante revelador. De hecho, es tan intrigante que existe un campo completo dedicado al estudio de los nombres: la onomástica.


Un onomástico es una persona que estudia nombres, y Leonard Ashley, onomástico y profesor emérito de inglés en el Brooklyn College, le explicó al San Francisco Examiner: "Puede parecer una tontería conversar sobre los nombres de las mascotas, pero es algo que dice mucho. No es una nimiedad. Se trata del comportamiento humano. Las personas nombran cosas, y los nombres demuestran la psicología que se encuentra detrás de todo".


Los nombres de la época medieval eran prácticos y descriptivos
En la época medieval, los perros eran valiosos por sus habilidades de caza, custodia y pastoreo, más de lo que se les consideraba como mascotas. Como tales, algunos nombres reflejaban sus usos prácticos o implicaban descripciones de la apariencia del perro, como los siguientes:
Sturdy (Robusto)
Whitefoot (Pie blanco)
Nosewise (Nariz sabia)
Holdfast (Sujetador)
Bellina (Bella)
Purkoy (de la palabra francesa pourquoi) fue el nombre del perro de una de las esposas del rey Enrique VIII (Ana Bolena), quien lo llamó así porque era muy inquisitiva. Otros perros eran nombrados después de las profesiones de sus dueños, como Hemmerli (pequeño martillo), el cual pertenecía a un herrero, y Speichli (hablaba poco), que pertenecía a un carretero.


En el siglo XVII, los nombres de los perros reflejaban sus personalidades
Para el siglo XVII, los perros quizás se consideraban un poco más como mascotas, y sus nombres comenzaron a reflejar sus personalidades en lugar de solo la apariencia o habilidades físicas.
El historiador John Reeks publicó una lista de nombres de perros de caza del siglo XVII, el cual le mencionó a Slate que proviene de un libro de Nicholas Cox de 1686 bajo el título de: "The Gentleman’s Recreation in Four Parts". Los aspectos destacados de la lista incluyen los siguientes:
Bravucón
Llorón
Bailarín
Ligero
Ráfaga
Galante
Malabarista
Niño feliz
Agradable
Pillo
Labios dulces
Majestuoso
Trueno
Chismoso
Trazador
Confiado
Asombro
Pretencioso


Las mascotas de la época victoriana eran miembros de la familia
En la era victoriana, se fundó la Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (cerca de 1824), la cual marca el comienzo de los derechos de los animales y un momento en el que las mascotas eran consideradas como miembros de la familia, o al menos símbolos de un estatus digno como los perros falderos Según la Victoriana Magazine:
“Para una mujer a la moda en la Inglaterra victoriana, un perro miniatura era tan indispensable como un palco en la opera o una presentación en la corte. "No era nadie sin su mascota que la acompañara a cualquier parte, la cual fuera alimentada y alojada tan delicadamente como el heredero al título y a las propiedades, tal y como se estipulaba en los requisitos caninos”.


Como consecuencia, los nombres comenzaron a adoptar más elementos humanos, incluyendo nombres de "personas" como:
Albert
Ada
Arabella
Dante
Ernie
Gertrude
Fletcher
Owen
Lucinda
Reuben
Wyatt
Myrtle
Rosetta
Al parecer, los registros de la secretaria de la ciudad de los Estados Unidos desde la década de 1870, revelaron perros registrados con nombres como Jack, Jip, Carlo, Major y Rover. El nombre popular "Fido" también aparece en dicha lista, el cual proviene de la palabra latina fiel.


Los nombres caninos en la actualidad son con frecuencia los mismos que los de las personas
En la actualidad, los perros son considerados profundamente como miembros de la familia, al otorgarles nombres como el de un niño. Una encuesta de perros registrados en 1997 en San Francisco, California, reveló que el nombre de perro más popular era Max (Fido todavía se encontraba en la lista).
Ademas, otros nombres habituales provenían de personas populares, como Molly, Jake, Lucy y Sam. En 2013, Rover, un sitio web que conecta a los dueños con cuidadores de mascotas, publicó una lista de los mejores nombres caninos de acuerdo con la base de datos de varios cientos de miles de clientes registrados en los Estados Unidos.


Los resultados fueron similares e incluyeron los siguientes:
1. Max
1. Bella
2. Charlie
2. Lucy
3. Buddy
3. Bailey
4. Jack
4. Daisy
5. Cooper
5. Lily
6. Rocky
6. Molly
7. Riley
7. Lola
8. Toby
8. Maggie
9. Bear
9. Sadie
10. Harley
10. Chloe


Para el 2018, la lista cambió solo un poco:
1. Max
1. Bella
2. Charlie
2. Lucy
3. Cooper
3. luna
4. Buddy
4. Daisy
5. Jack
5. Lola
6. Rocky
6. Sadie
7. Duke
7. Molly
8. Bear
8. Bailey
9. Tucker
9. Maggie
10. Oliver
10. Stella


Al igual que los nombres en el pasado, los nombres actuales también pueden señalar tendencias de la cultura pop y más. Rover observó que, durante el 2018, los nombres de Harry y Meghan aumentaron su popularidad hasta un 133% y 129%, respectivamente, como cortesía de la boda real. Otros nombres populares eran personajes de ciencia ficción, músicos y superhéroes, especialmente los de la Mujer Maravilla, Pantera Negra, Guerra de las Galaxias y Guardianes de la Galaxia.
También se incrementaron los nombres de villanos hasta un 18 %, con los cinco nombres más importantes reportados como Loki, Bane, Sid, Anakin y Lex. Incluso aparecieron nombres de comida y almuerzo, incluyendo Bizcocho, Canela, Panecillo y Waffles.


Como Kate Jaffe, le mencionó a NPR: "Hemos descubierto que las cosas que más nos interesan, ya sean los alimentos que consumimos o la cultura pop, realmente se ven reflejados en cómo nombramos a nuestros perros", una tendencia que parece haber prevalecido a lo largo de los siglos.




Publicado en Mascotas Mercola