Un estudio genético ha descubierto que los perros pequeños domésticos probablemente se originaron en Oriente Medio hace más de 12.000 años, según un estudio de la Universidad de California en Los Ángeles que se publica en la revista BioMed Central Biology.
Los
investigadores siguieron los antecedentes evolutivos del gen IGF1 y
descubrieron que la versión del gen principal determinante del tamaño
pequeño probablemente se originó como resultado de la domesticación del
lobo gris de Oriente Medio.
Los científicos, dirigidos por Melissa Gray y Robert Wayne,
examinaron una gran muestra de poblaciones de lobo gris. Según explica
Gray, la mutación del tamaño corporal pequeño es posterior a la
domesticación de perros. Sin embargo, dado que todos los perros pequeños
poseen esta variante de IGF1, probablemente ésta surgió a inicios de su
historia.
“Nuestros resultados muestran que la versión del gen
IGF1 descubierta en los perros pequeños está estrechamente relacionada a
la descubierta en los lobos de oriente medio y es consistente con un
origen antiguo en esta región de perros domésticos pequeños”, afirma la
investigadora.
Los trabajos arqueológicos previos en Oriente Medio
han desenterrado los restos de pequeños perros domésticos con una
antigüedad de 12.000 años. Los yacimientos en Bélgica, Alemania y Rusia
occidental contienen restos más antiguos, de entre 13.000 y 31.000 años,
pero estos son de perros más grandes. Los descubrimientos apoyan la
hipótesis presentada por el equipo de Gray de que el tamaño corporal
pequeño evolucionó en Oriente Medio.
La reducción en el tamaño corporal es una característica común de la domesticación y se ha incluido en otros animales domesticados como vacas, cerdos y cabras. Según concluye Gray, “el tamaño pequeño podría haber sido más deseable en las sociedades agrícolas muy pobladas, en las que los perros podrían haber vivido en parte fuera o confinados en espacios interiores”.
Publicado en ABC