Son muchos los mitos y verdades de perros y gatos que nos encontramos muchos días en la clínica veterinaria, a continuación vamos a ir desengranando algunos de ellos, esperamos que este artículo os sea interesante.
– Los perros mueven la cola cuando están felices:
MITO FALSO: El movimiento de alegría va acompañado de un ligero contoneo de la cadera y de movimientos relajados, sin embargo, un movimiento de la cola un tanto rígida acompañado de una postura corporal fija, mirada fija, orejas alertas y un movimiento del cuerpo inclinado hacia delante, significa “estoy alerta, me siento amenazado”.
– Los perros mueven la cola cuando están felices:
MITO FALSO: El movimiento de alegría va acompañado de un ligero contoneo de la cadera y de movimientos relajados, sin embargo, un movimiento de la cola un tanto rígida acompañado de una postura corporal fija, mirada fija, orejas alertas y un movimiento del cuerpo inclinado hacia delante, significa “estoy alerta, me siento amenazado”.
– Los perros y los gatos no se llevan bien:
MITO FALSO: Pueden compartir casa si son presentados cuando son cachorros
MITO FALSO: Pueden compartir casa si son presentados cuando son cachorros
– Los perros de raza pura no enferman:
MITO FALSO: Cualquier perro puede tener enfermedades hereditarias propias. No significa que los mestizos nunca enfermarán. Pero algunas razas, debido a factores genéticos, son más propensas a desarrolar un tipo u otro de patologías.
– Los gatos tienen 7 vidas:
MITO FALSO: Este rumor se remonta al antiguo Egipto. Por la supervivencia ante las caídas creían que no podían tener una sola vida. Los gatos tienen más desarrollado el equilibrio que los perros pero no son inmunes a las caídas que otros mamíferos.
MITO FALSO: Este rumor se remonta al antiguo Egipto. Por la supervivencia ante las caídas creían que no podían tener una sola vida. Los gatos tienen más desarrollado el equilibrio que los perros pero no son inmunes a las caídas que otros mamíferos.
MITO FALSO: Es tóxico, puede producir, sintomatología gastrointestinal, problemas respiratorios, letargia, y en algunos casos anemia hemolítica.
– Si tiene la nariz o la trufa caliente significa que tiene fiebre:
MITO FALSO: No es señal de enfermedad, ni tampoco tener la trufa húmeda es síntoma de buena salud, la mejor vía de determinar si un animal tiene fiebre es por vía rectal, la temperatura deberá oscilar entre 38º- 39º.
– La saliva del perro es curativa:
MITO FALSO: Que ellos se laman la herida, puede ser porque les causa molestia. Al lamerla lo que estamos produciendo es un problema de la cicatrización de la misma y un problema de infección, dado que la boca es una de las partes que mayor cantidad de bacterias posee.
– 1 año de nuestra mascota equivale a 7 años nuestros:
MITO FALSO: Todo depende del tamaño de nuestro perro, las razas pequeñas envejecen más lento, sin embargo las razas grandes llegan a la madurez a los 8 años.
– los perros que comen pared es por falta de calcio:
MITO FALSO: Los perros no tienen forma de saber si la pared tiene calcio, no obstante si nuestro perro realiza esa acción e conveniente hablar con el veterinario puesto que puede ser un problema de conducta.
– Los gatos son muy sucios:
MITO FALSO: Es verdad que tanto su orina como sus heces tiene un olor muy penetrante, pero ellos odian estar sucios, de hecho hay estudios en los que se ha visto que dedican unas 8 horas al día en su aseo corporal.
– Los cachorros necesitan un suplemento de calcio cuando están en crecimiento:
MITO FALSO: Es un error bastante común suplementarles la dieta a un cachorro a base de pastillas de calcio, ya que un suplemento de calcio en una raza grande puede derivar en un crecimiento muy rápido y como consecuencia puede derivar en problemas óseos y deformidades en las extremidades de por vida.
– Los perros no se deben bañar hasta tener todas las vacunas:
MITO FALSO: no hay ningún estudio que pueda sustentar tal afirmación, al igual que cuando tenemos un bebé debemos tomar todas las precauciones posibles (temperatura del agua, secado…), no se debe de quedar húmedo, entonces sí podría quedarse frio y desencadenar un proceso catarral.
– Los perros comen hierba para purgarse:
MITO VERDAD A MEDIAS: Cuando ellos comen hierba si es cierto que buscan una causa para provocarse el vómito, comen hierba y vomitan, pero al igual que en las personas, el vómito en perros es patológico y no hay que considerarlo como algo normal.
– Los perros comen una vez al día:
MITO FALSO: Aunque sus jugos gástricos sean más fuertes y necesitan más cantidad de proteína siempre tolerarán entre 2 ó 3 digestiones moderadas. Es como si hiciéramos una comida y tuviéramos el aparato digestivo 23 horas sin realizar una función correcta. Especial cuidado con los perros de raza grande porque al ingerir raciones grandes son más propensos a sufrir torsiones y dilataciones de estómago.
– Si comen dulces se quedarán ciegos:
MITO VERDAD A MEDIAS: Ellos no tienen la misma tolerancia a los incrementos de azúcar que nosotros, es más por una ingestión incontrolada de hidratos de carbono, frutas, dulces… puede producir diabetes y esto a su vez producir una ceguera. La solución para que esto no ocurra es dar una dieta controlada y equilibrada, sin alicientes externos.
– A los gatos les gusta la leche y hay que darles leche:
MITO FALSO: La mayor parte de los gatos son intolerantes a la lactosa de manera que darles lácteos puede provocarles problemas digestivos.
– Si tienes gato y estás embarazada el gato debe ir fuera de casa y te hará abortar:
El hecho de tener un gato en casa no tiene porque hacer abortar a la mujer. Si es verdad que el “toxoplasma gondii”, cuando la mujer es portadora puede provocar abortos espontáneos. El aborto podría ser si tu gato infectado (sale a la calle, caza roedores) contrae toxoplasma y la mujer embarazada tiene contacto directo con las heces del gato. Es más fácil que una mujer se contagie por comer carne cruda o verduras contaminadas por el parásito que por el gato. Estudios han dictaminado que el gato es responsable al 1% de contagio a nivel mundial.