El Bichon Maltés (también llamado Maltés)
es, casi sin duda alguna, una de las razas de perros falderos más
antiguas de Occidente, pero ha habido discrepancias, durante mucho
tiempo, acerca del verdadero origen de esta encantadora raza. Charles
Darwin situó los orígenes de esta raza hacia el año 6.000 a.C., aunque
se ha hallado una escultura de este tipo de perro que tenía 2.000 años
más de antigüedad. Se supone que se trataba del juguete de un niño. El
emperador Tiberio Claudio (10 a.C.-54 d.C). tenía uno de estos perros y
parece probable que fueran llevados a Asia por los romanos. Finalmente
llegaron a China, donde se cree que los perros tipo Maltés contribuyeron al origen del Pequinés actual.
La raza ha tenido muchos nombres a lo largo de su historia, entre ellos los de «Perro Melitae», «El Antiguo Perro de Malta», «Confortador», «Spaniel Apacible», «Perro Melenudo» y «Perro León Maltés». Este último apelativo alude, muy probablemente, al hecho de que a varias de las antiguas razas miniatura se les cortaba el pelo de forma que parecían un león. Esto provocó alguna confusión, especialmente con la raza que conocemos actualmente por este corte de pelo y que se llama Löwchen (Pequeño Perro León).
Muchas obras de arte precristianas están adornadas con la imagen de un Maltés, y en las cortes de la Roma imperial era el perro favorito entre las mujeres y llegó a ser conocido como «Perro de las patricias romanas». Acerca de estos perros llegó a escribirse: «Cuando fallece su favorito, deposita sus restos en una tumba y erige un monumento sobre ésta con la inscripción "Descendencia del linaje de Malta"». Los Malteses estuvieron también muy implicados en la cultura egipcia entre los años 600 y 300 a.C., y en esos tiempos eran venerados como miembros de las familias reales.
En Grecia, los primeros registros históricos
conocidos de la raza datan del año 350 a.C. y se deben al filósofo
Aristóteles, que sitúa su lugar de origen en Malta, al sur de Sicilia.
De todas formas, se han hallado imágenes del Maltés en ánforas griegas que datan del año 500 a.C.
Muchos de los antiguos pintores italianos incluyeron perros en sus cuadros y parece que muchos de ellos eran Malteses. Para añadir una mayor confusión al origen geográfico de esta raza, existía una ciudad en Sicilia hacia el año 25 d.C. llamada Melitia. Aquí se podían encontrar unos perros pequeños y hermosos llamados canis melitei. Es comprensible que surgiera la confusión, ya que la isla de Malta fue conocida en la antigüedad como isla de Melita. En 1851, Youatt escribe que se les podía encontrar no sólo en Malta sino también en otras islas del Mediterráneo, donde «mantenían el mismo carácter, siendo totalmente fieles a sus propietarios… [aunque] se llevaban mal con los extraños». Aunque decía que no eran mayores que un hurón o una comadreja consideró que «No eran pequeños en cuanto a su entendimiento ni inestables en cuanto a su cariño».
Muchos de los antiguos pintores italianos incluyeron perros en sus cuadros y parece que muchos de ellos eran Malteses. Para añadir una mayor confusión al origen geográfico de esta raza, existía una ciudad en Sicilia hacia el año 25 d.C. llamada Melitia. Aquí se podían encontrar unos perros pequeños y hermosos llamados canis melitei. Es comprensible que surgiera la confusión, ya que la isla de Malta fue conocida en la antigüedad como isla de Melita. En 1851, Youatt escribe que se les podía encontrar no sólo en Malta sino también en otras islas del Mediterráneo, donde «mantenían el mismo carácter, siendo totalmente fieles a sus propietarios… [aunque] se llevaban mal con los extraños». Aunque decía que no eran mayores que un hurón o una comadreja consideró que «No eran pequeños en cuanto a su entendimiento ni inestables en cuanto a su cariño».
Algunos consideran que el Maltés fue una de las antiguas razas miniatura francesas y tiene, ciertamente, un vínculo muy estrecho con las razas de bichones, como el Bichon Frisé, el Boloñés, el Habanero y el Coton de Tuléar. De todas formas, no se debería confundir al Maltés con el Bichon Frisé actual, a pesar del hecho de que en ciertos puntos de su historia haya sido también llamado «Bichon». Algunos criadores incluso han creído que la raza proviene del desierto de Gobi, y esto se le atribuyó debido a su querencia por el calor y el sol.
El Maltés utilizado para el comercio
El lugar de origen del Maltés
es todavía más confuso debido al hecho de que este perro viajaba mucho a
distintas partes del mundo, pues era utilizado en el comercio como
objeto de trueque a cambio de seda china, entre otras cosas. En esos
tiempos la seda era muy apreciada y se consideraba que valía su peso en
oro. De acuerdo con el escritor Idstone, los Malteses
solían ser llevados a tierra firme para venderlos, o los propietarios de
barcas los llevaban a los pasajeros embarcados. Añadió, tristemente,
que eran «sencillamente pobres perros pequeños de pelo largo lavados, a
los que se les había aplicado almidón y que habían sido cepillados…»
Publicado en MundoAnimalia