Los humanos tenemos una esperanza o expectativa de vida de alrededor de 80 años, nuestros peludos amigos llegarán, si bien les va, a los 15 años y eso si no padecen de ninguna enfermedad que termine con su vida antes.
Cada perro, según su raza, puede llegar a vivir una cierta cantidad de años. Por lo general, los perros de raza pequeña viven más tiempo que los de raza grande, y dentro de los de raza grande, los más pesados viven menos que los perros de tipo más atlético.
Cada perro, según su raza, puede llegar a vivir una cierta cantidad de años. Por lo general, los perros de raza pequeña viven más tiempo que los de raza grande, y dentro de los de raza grande, los más pesados viven menos que los perros de tipo más atlético.
Como todos sabemos, tener un perro es una de las mayores alegrías en la vida. Nuestros amigos peludos nos dan un amor incondicional, compañía y más sonrisas de las que es posible contar. Aun así, hay una parte negativa al tener un perro. Podemos soportar el desorden y daños menores, pero es innegable el hecho de que la gente vive más que los perros, quienes eventualmente dejan de estar entre nosotros.
No obstante, cualquiera dirá que, desde luego, compensa convivir con un perro, de tal modo que incluso llega a convertirse en un miembro más de la familia. No hay una manera específica de responder a la pregunta de cuánto viven los perros, ya que variará en cada caso, pero hay muchos estudios de la esperanza media de vida de razas como el Golden Retriever, el Bulldog y muchas otras razas.
Pero la esperanza de vida media no es lo único importante. La misma definición de media significa que muchos perros vivirán menos, mientras que otros pueden llegar a vivir bastante más. Una mejor manera de evaluar la longevidad de nuestra mascota es convertir años de perros en años de humanos. De este modo, podemos entender cuando un perro se convierte en adulto, en un anciano o hasta en un centenario.
Saber cuánto viven los perros no suavizará el dolor pero podrá ayudar a los dueños a cuidarlos mejor y hacer que sus mascotas vivan lo más felices posibles. Aunque a veces estos fieles amigos se comporten de una forma poco adecuada (bien sea jugando, ladrando en casa o desobedeciendo nuestras órdenes), debemos reflexionar sobre el trato que les damos.
Nunca hay que lastimarles y hemos de enseñarles con otras técnicas y nunca con golpes. Dado que ellos te ofrecen amor y dedicación cada vez que llegas a casa, correspóndeles alimentándolos, jugando con ellos, acariciándolos y bañándolos. No olvides que beneficiarán tu salud y harán tu convivencia con ellos más placentera.
Por otro lado, no olvides llevarlos al veterinario para vacunarlo o cada vez que sospeches que se encuentra mal. Es crucial para prevenir enfermedades o para buscar una curación a las mismas.
Agradecemos la colaboración para la publicación de esta nota a: Burson-Marsteller - Fuente: Pet Food Institute