HOLA AMIGOS


Bienvenidos a mi blog. Este será un sitio dedicado a la raza que me apasiona, el cocker spaniel ingles, y en general a todos los perros, con raza o sin ella. Aquí iré colgando temas relacionados con ellos, con los cocker y todo aquello que me parezca interesante, sobre veterinaria, etología etc...

Encontrarás que algunos artículos sobre el cocker son un poco técnicos, pero la mayoría son para todos los públicos. ¡No te desanimes !



Agradecimiento:

Me gustaría agradecer a todas las personas que nos han ayudado, explicado y aguantado tantas y tantas cosas, y que han hecho que nuestra afición persista.

En especial a Pablo Termes, que nos abrió su casa de par en par y nos regaló jugosas tardes en su porche contando innumerables “batallitas de perros”. Suyas fueron nuestras dos primeras perras y suya es buena parte de culpa de nuestra afición. A Antonio Plaza y Alicia, también por su hospitalidad, su cercanía, y su inestimable ayuda cada vez que la hemos necesitado. También por dejarnos usar sus sementales, casi nada. Y a todos los criadores y propietarios que en algún momento, o en muchos, han respondido a nuestras dudas con amabilidad.

Y, por supuesto, a Rambo, Cibeles y Maripepa, a Chulapa y Chulapita, y a Trufa, como no, y a todos los perros con pedigrí o sin el, con raza o sin ella por ser tan geniales.

Muchas gracias


Te estaré muy agradecido si después me dejas tus impresiones en forma de comentario.

Espero que te guste y que vuelvas pronto.



PARA LA REALIZACIÓN DE ESTE BLOG NINGÚN ANIMAL FUE MALTRATADO




jueves, 12 de noviembre de 2015

PERROS CIVICOS (¿O TAL VEZ AMOS CIVICOS?)

Cuelgo este articulo, porque yo también me siento "mal visto" cada vez que paseo a mis perros. Da la sensación de que la gente perrera sea un poco delincuente, solo por el hecho de tener perro, independientemente de la educación de amo y perro.



Harpo es más que un nombre elegido al azar. Es un perro que pertenece a mi vida. No voy a entrar en tópicos como que algunos perros son mejores que las personas. Mejor, algunas personas educan mejor a sus perros que otras a sus hijos. No me erijo en representante ilustre de la educación de Harpo. Pero sí quiero romper una lanza en favor de aquéllos que tenemos perro y somos conscientes de que vivir en sociedad implica adquirir una actitud cívica.



Hace muchos años, cuando no existían dispensadores de bolsas para la recogida de excrementos caninos, no había ni un solo momento del día que no me acompañara en mi bolso más de una bolsita para tal efecto. He llegado a pasear hace años por mi barrio, temerosa de las inquisitivas miradas de quienes no sólo no son amantes de los perros (lo que respeto profundamente) y te insultan sino que además consideran que quien los tiene es "un ser tremendamente irrespetuoso con el medio". En ocasiones he sentido la sensación de mostrar mi bolso, abrirlo y dejar fisgar y olisquear a esas miradas insistentes, similares a algunas cajeras cuando sales del supermercado. Pero mi dignidad les ha prohibido transgredir mi intimidad. A ambas.



Valga como ejemplo y sirva de reflexión, lo que aconteció en un parque recientemente inaugurado en mi barrio, en la calle Asturias de Alicante. Harpo y yo lo cruzamos diariamente y no hay un instante que nuestras miradas caninas no queden atónitas ante el indescriptible panorama paisajístico. Restos de latas de refrescos, colillas, papeles, botellas, envoltorios y un sinfín de restos. Harpo da saltitos y esquiva la ingente cantidad de obstáculos que bloquea sus pasos. Y se acuerda, posiblemente de la pandilla de jóvenes que alteran el plan original del parque, sin solicitar proyectos de modificación al Ayuntamiento.
Atravesamos el parque de nuevo y en una palmera Harpo me mira solicitando autorización para realidad una de sus necesidades fisiológicas. Con mi consentimiento, preparo bolsa, aflojo correa y le permito. Un grito desgarrador me increpa. Nos insulta. No doy crédito.



Recuerdo desde muy pequeña la existencia de papeleras en las calles. No es novedoso. Hace unos años hay dispensadores de bolsas para la recogida de excrementos caninos en todos los parques. Un minuto sería suficiente para la reflexión. ¿A quién hay que increpar? Gracias

Escrito por Silvia Cristina Aznar en El País