El Elkhound Blanco Sueco surgió de un cachorro muy pálido nacido en una camada de Elkhounds Suecos en 1942. Los cachorros de color claro son raros hoy en día, aunque ocasionalmente aparecen en camadas de diversas razas de Elkhounds y se especula que provienen de un cruce temprano con un Samoyedo. Se decía que estos cachorros blancos poseían "poderes" especiales que hacían que los alces se quedaran quietos cuando esta raza estaba cerca. Interesados por este fenómeno, los aficionados comenzaron a investigar si los perros blancos (tanto de camadas de Elkhound Sueco como de Noruego) también eran hábiles cazadores, además de poseer esta habilidad para hipnotizar a los alces. Por fortuna, muchos de ellos lo eran, lo que propició la cría continua y el reconocimiento final de la raza por parte del Kennel Club Sueco en 1993. A pesar de la palabra "elk" (alce) en el nombre, esta raza cazaba principalmente alces y, ocasionalmente, también linces, osos y tejones.
El pelaje doble del Elkhound Blanco Sueco es fácil de cuidar, aunque muda con frecuencia. Es denso, liso y áspero para proteger al perro de las inclemencias del tiempo. Como su nombre indica, la raza siempre es blanca, aunque a veces puede presentar un ligero matiz amarillento. Se trata de un spitz rectangular de tamaño mediano, con orejas puntiagudas y cola enroscada características. La crianza para lograr una conformación adecuada es fundamental, tanto que el club de origen insiste en que todo perro criado debe obtener al menos una calificación de "suficiente" en una exposición canina para ser considerado un candidato a la crianza. Además, cada perro debe aprobar una prueba de caza y varias pruebas de salud. Esto garantiza que la raza se mantenga sana, conserve sus instintos de caza y no se desvíe físicamente del estándar.
Los Elkhounds Blancos siempre están atentos a lo que ocurre a su alrededor, pero tienen un comportamiento bastante tranquilo. Pueden ser excelentes compañeros en el hogar adecuado, aunque es importante entender que son perros de caza que no estarán contentos sin trabajo. ¡Esta no es una raza para quien busca un perro para estar en casa todo el día! Si se combina con un dueño activo y con experiencia, y se le proporciona entrenamiento y tareas interesantes, este spitz prosperará. A pesar de ser una raza relativamente joven, ¡el futuro es prometedor para este perro de caza trabajador y hábil.