Jean Pierre Arboleda nació en Quito, Ecuador. Creció con un profundo amor por los animales y la naturaleza y le encantó dibujar y pintar durante su infancia. Al convertirse en adulto se trasladó a la ciudad de Nueva York y recibió su BFA en ilustración en la Escuela de Artes Visuales y su maestría en arte en la Academia de Nueva York. Su obsesión por los animales y la naturaleza creció hasta abarcar temas que se referían al cambio evolutivo, toxicidad ambiental y la guerra.
Las cualidades humanoides que Jean Pierre le da a sus animales desafían al espectador a ver el mundo desde el punto de vista del animal: en un mundo sin humanos, donde los animales han dominado a los seres humanos y se divierten con las baratijas humanas. Sus súbditos se mutan y se mueven, luchan con la destrucción y el caos, y luchan con los problemas sociales y los contextualizan con los animales en una crítica de la humanidad y la compasión.