Cada año en España nacen miles de galgos criados sólo para cazar.
Llevan una vida llena de miedo y crueldad, y cuando se les considera
inútiles, son salvajemente asesinados, colgados de los árboles,
arrojados a pozos, golpeados hasta la muerte o abandonados.
Aunque los galgos necesitan siempre de nuestra ayuda, se ha decidido
crear el Día Mundial de Galgo como una forma de aunar nuestras voces
para denunciar la difícil situación de esta maravillosa raza. Se ha
elegido el 1 de febrero porque es la fecha que marca el final de la
temporada de caza, cuando para muchos galgos llega un destino aún peor
que la vida cruel que han soportado.
Los galgos se utilizan
principalmente para la caza o para correr la liebre. Durante la
temporada de caza que va de octubre a enero, muchos viven encerrados en
zulos oscuros y estrechos y si no salen a cazar, pasan sus días
enclaustrados y totalmente descuidados. Se les entrena con técnicas
horribles, como remolcarles atados a coches, camiones o motos a mucha
velocidad.
Al final de la temporada de caza los galgueros se
deshacen de muchos galgos de las formas más horribles que podamos
imaginar: los cuelgan vivos de los árboles, los tiran a pozos, los dejan
morir de hambre, los golpean hasta morir o los abandonan. Miles de
galgos son asesinados cada año.
Una de las maneras favoritas entre los cazadores
para deshacerse de los galgos se conoce como " tocar el piano". Atan a
los galgos del cuello y los cuelgan en un árbol para que el pobre perro
apenas llegue al suelo, tratando de equilibrar y " baila " adelante y
atrás con las patas traseras casi en el suelo, intentando evitar su
estrangulación. Así es asesinado con una muerte lenta, de modo que el
perro experimenta pánico, ansiedad, desesperación y un dolor
inimaginable. La asfixia puede llevar horas, a veces incluso días. Al
final, cuando el galgo ya no puede apoyarse sobre sus patas traseras,
agotado en la trampa, finalmente se asfixia hasta la muerte.
Se les abandona simplemente cuando tienen una pata
rota porque no pueden cazar de nuevo. Los que sobreviven languidecen
abandonados en perreras donde, inevitablemente, terminan muriendo.
La cría incontrolada y el abandono masivo de
perros al final de la temporada de caza dejan una enorme población de
perros famélicos y enfermos.
Asociaciones en España, los rescatan y les buscan
un nuevo hogar, dándoles así una nueva oportunidad de futuro. El Galgo
es una raza verdaderamente preciosa. Aunque los galgueros no los
consideran mascotas, se convierten en compañeros maravillosos y quedan
eternamente agradecidos cuando se les da una segunda oportunidad.
World Galgo Day: February 1
Every year in Spain, thousands of galgos are born and bred to hunt.
They endure a life of fear and cruelty and when they are no longer
useful, they are savagely killed… Hung from trees, thrown into wells,
beaten to death or abandoned.
Even though Galgos need our help all year long, World Galgo Day was
started so that we can unite and speak with one voice about the plight
of these beautiful dogs. February 1 was chosen because it marks the end
of hunting season when many Galgos meet a fate worse than the life of
cruelty that they have already endured.
Galgos are mainly used for
hunting or coursing hare. During the annual hunting season that runs
from October to January, many live in cramped dark sheds when they are
not coursing, spending their days confined and neglected. Training
techniques are barbaric and include towing Galgos from cars, trucks and
motorcycles at high speeds.
Known as Galgueros, hunters dispose of Galgos at
the end of hunting season in the most horrific ways imaginable... hung
from trees, thrown into wells, starved, beaten to death or abandoned. It
is estimated that thousands of Galgos are killed every year.
A favorite among hunters to dispose of unwanted
Galgos is called "piano playing". The galgo is tied around the neck and
hung in a tree so that the poor dog barely reaches the ground with its
hind paws, trying to balance and "dancing" back and forth with the back
legs and paws, barely on the ground, to avoid strangulation. Being
killed in this way is a slow death and that the dog experiences panic,
anxiety, despair and unimaginable pain. The suffocation can take hours
and sometimes even days. In the end, when the Galgo can no longer manage
to stand on its hind legs, exhausted in the snare, the dog finally
suffocates to death.
If merely abandoned, they are purposely crippled
so that they cannot physically return to the hunter. Those that survive
abandonment languish in state-run shelters where they inevitably die.
The excessive, uncontrolled breeding and mass
abandonment of dogs at the end of hunting season leaves a massive
population of starving and sick dogs.
Associations in Spain, rescue and rehabilitate as
many dogs as possible so that they have a chance at a future and a
forever home. The Galgo is a truly precious breed. Although not
considered pets by Galgueros, they are wonderful companions and
eternally grateful for a second chance.
Publicado en Dia del Galgo