«La noción de que es divertido ver animales siendo coaccionados para actuar como torpes humanos, o entretenido ver a animales fuertes reducidos y acobardados por golpes y latigazos, apoya la vieja idea de que somos superiores a animales de otras especies y tenemos derecho a dominarles.»
Dr Desmond Morris, antropólogo y experto en comportamiento animal.
Los circos se nos presentan como lugares atractivos, divertidos, y originales, y por ello son visitados por muchos niños atraídos también por los animales que pueden ver en ellos . Por desgracia en aquellos circos que utilizan animales existe otra realidad detrás de la alegría y el colorido de las carpas, los payasos y los malabaristas animales, una realidad llena de sufrimiento, privación y muerte. Para los animales que son obligados a vivir en los circos, existen pocas cosas positivas: simplemente diferentes formas de experimentar malestar y sufrimiento.
Privación de libertad:
Los trucos:
El transporte de una ciudad a otra:
Las enfermedades y la muerte:
Los animales que viven en los circos tienen los días contados, ya que muchos de ellos son matados o abandonados cuando se hacen mayores o se ponen enfermos, dejando así de desempañar la función que hace que otras/os valoren sus vidas: la de servir a un espectáculo. Otras veces, los circos los venden a otros circos, zoológicos, colecciones privadas de animales exóticos, e incluso a laboratorios de investigación. Generalmente terminan sus vidas de una forma tan triste como las vivieron: en reclusión, bajo coacción y miseria.
Diversión sin animales:
Publicado en IgualdadAnimal