HOLA AMIGOS


Bienvenidos a mi blog. Este será un sitio dedicado a la raza que me apasiona, el cocker spaniel ingles, y en general a todos los perros, con raza o sin ella. Aquí iré colgando temas relacionados con ellos, con los cocker y todo aquello que me parezca interesante, sobre veterinaria, etología etc...

Encontrarás que algunos artículos sobre el cocker son un poco técnicos, pero la mayoría son para todos los públicos. ¡No te desanimes !



Agradecimiento:

Me gustaría agradecer a todas las personas que nos han ayudado, explicado y aguantado tantas y tantas cosas, y que han hecho que nuestra afición persista.

En especial a Pablo Termes, que nos abrió su casa de par en par y nos regaló jugosas tardes en su porche contando innumerables “batallitas de perros”. Suyas fueron nuestras dos primeras perras y suya es buena parte de culpa de nuestra afición. A Antonio Plaza y Alicia, también por su hospitalidad, su cercanía, y su inestimable ayuda cada vez que la hemos necesitado. También por dejarnos usar sus sementales, casi nada. Y a todos los criadores y propietarios que en algún momento, o en muchos, han respondido a nuestras dudas con amabilidad.

Y, por supuesto, a Rambo, Cibeles y Maripepa, a Chulapa y Chulapita, y a Trufa, como no, y a todos los perros con pedigrí o sin el, con raza o sin ella por ser tan geniales.

Muchas gracias


Te estaré muy agradecido si después me dejas tus impresiones en forma de comentario.

Espero que te guste y que vuelvas pronto.



PARA LA REALIZACIÓN DE ESTE BLOG NINGÚN ANIMAL FUE MALTRATADO




lunes, 12 de junio de 2023

FOTO DE LA SEMANA 7/23

Fotografía de Karthik Subramaniam

Un águila calva llega para robar una percha en un tronco de árbol que ofrece una vista estratégica de la costa en la Reserva Chilkat Bald Eagle en Alaska. Cuando otras águilas arrastran salmón recién capturado del agua, estos transeúntes se abalanzan para tomar una parte. "Las horas de observación de sus patrones y comportamiento me ayudaron a capturar momentos como estos", dice el fotógrafo Karthik Subramaniam, un ingeniero de software apasionado por la fotografía de vida silvestre.

“Dondequiera que haya salmón, habrá caos”. Este fue el lema de Karthik Subramaniam cuando acampó cerca de la orilla de la reserva de águila calva Chilkat en Alaska, esperando la acción.
Era el último día de su viaje fotográfico de una semana y solo unas horas antes de que partiera su ferry, pero el ingeniero de software convertido en fotógrafo aficionado se quedó, observando cómo las águilas calvas entraban y salían de los caladeros. Haines, Alaska, un extremo sur de la tierra intercalado entre dos ensenadas, alberga las mayores congregaciones de águilas calvas del mundo cada otoño, cuando unas 3000 llegan a tiempo para la carrera del salmón.
Subramaniam notó que había un tronco donde algunos se demoraron. Este lugar elegido puso a las águilas cerca de la orilla, donde sus compañeros a veces llegaban con el botín de una caza exitosa: un salmón recién pescado. Cuando aparecía un pez, los transeúntes descendían por sus porciones.
Cuando Subramaniam enfocó su lente en una rama, hubo una conmoción: un águila que se acercaba se abalanzó, intimidando a su residente actual y reclamando el lugar privilegiado. Tituló la imagen resultante “Dance of the Eagles” como homenaje a una guerra de dragones ficticia en la novela A Dance with Dragons de George RR Martin, y la presentó al concurso National Geographic Pictures of the Year.
Durante años, Subramaniam ha estado fotografiando paisajes y sus viajes, pero en 2020, castigado por la pandemia en su casa de San Francisco, comenzó a experimentar con la fotografía de vida silvestre. Recorrió las reservas naturales locales, conduciendo una hora hasta la costa nacional de Point Reyes y caminando por los parques de la ciudad, en busca de aves y otras criaturas. Al enterarse de que dos águilas calvas estaban anidando en la parte superior de una escuela primaria a dos horas de su casa, Subramaniam comenzó a ir allí los fines de semana, acampando durante el tiempo necesario para capturarlas volando a cazar.
La paciencia que aprendió en ese período de prueba valió la pena. El viernes, su fotografía de las águilas en Alaska fue anunciada como la ganadora del gran premio, lo que le valió un lugar en la edición de mayo de esta revista. Lo que Subramaniam aprecia más de la foto es la tensión del momento. “Abre la pregunta: ¿qué pasó después?” él dice. La realidad es menos misteriosa: el águila triunfante se aburrió cuando no apareció ningún salmón y pronto cedió el lugar al próximo observador hambriento.