Los problemas urinarios pueden causar al perro dolor e incomodidad, por lo que reconocer rápidamente las señales es muy importante para evitar estos signos Aquí presentamos algunos signos clínicos, causas y tratamientos comunes de los trastornos urinarios en perros.
El primer paso para sospechar que le perro está padeciendo un problema urinario es detectar los signos clínicos. Cada perro es diferente, pero si ves que el tuyo manifiesta alguno de estos signos clínicos comunes, es esencial visitar al veterinario.
Signos clínicos y causas de la litiasis urinaria en perros
Casi el 20 % de todos los problemas urinarios con que se encuentran los veterinarios se diagnostican como urolitiasis , también conocida como formación de "cálculos" en la vejiga o el tracto urinario. Estos cálculos son una acumulación de diferentes minerales presentes en la orina del perro; si la concentración de minerales es demasiado alta pueden comienzan a cristalizar.
Si tu perro tiene cálculos urinarios, puede tener dificultades para orinar o padecer dolor al hacerlo. Incluso el cálculo puede estar bloqueando la salida de orina al exterior. Algunos perros están más predispuestos a padecer urolitiasis, como las razas más pequeñas ya que, al tener menores volúmenes de orina y orinar con menos frecuencia, la concentración de minerales en esta, es más elevada. También es más común en los perros machos y de edad avanzada.
Tratamiento de la urolitiasis en perros
Dependiendo de la gravedad del problema, el veterinario puede optar por extraer el cálculo quirúrgicamente para evitar una mayor incomodidad al perro. Sin embargo, se suelen recomendar cambios en la dieta y en el estilo de vida para ayudar a disolver los cálculos y evitar que se formen nuevos.
Una dieta con alto contenido en agua, como la basada en alimentos húmedos, ayuda a diluir la orina del perro y evita la concentración de minerales; también es recomendable animar al animal a beber mucha agua y sacarle a orinar con frecuencia. También hay alimentos que ayudan a cambiar el pH de la orina del perro y a prevenir la formación de ciertos tipos de cálculos.
Signos clínicos, causas y tratamientos de las infecciones del tracto urinario en perros
Las infecciones del tracto urinario inferior suelen ser un diagnóstico bastante frecuente dentro de los problemas urinarios, especialmente entre las perras. Generalmente se producen infecciones cuando las bacterias de las heces ó fluidos corporales se introducen accidentalmente en el tracto urinario, aunque la infección también puede ser un signo de un sistema inmune debilitado. También se pueden producir infecciones urinarias en perros como consecuencia de una enfermedad crónica, como enfermedades renales ó de la vejiga urinaria, ó como consecuencia de diabetes.
Si tu perro padece una infección del tracto urinario, intentará orinar con frecuencia aunque no siempre lo consiga. La orina puede estar turbia o contener sangre. Es posible que el perro se lama alrededor del orificio de salida de la uretra para tratar de aliviar la irritación. En casos graves, los perros también pueden tener fiebre.
Llévalo al veterinario para que le haga una revisión exhaustiva y determine el origen del problema. Si es una infección, se tratará con antibióticos. Además, se debe estimular al perro a beber mucha agua para que aumente la frecuencia de la micción.
Signos clínicos, causas y tratamientos de los problemas de vejiga urinaria en perros
Los trastornos de la vejiga urinaria son bastante frecuentes en los perros y, a menudo, están relacionados con infecciones del tracto urinario y litiasis urinaria. La vejiga es la responsable del almacenamiento de la orina. Sus músculos y nervios al detectar llenado mandan señales que indican al perro cuándo es el momento de la micción. Las obstrucciones, incluidas las producidas por cálculos, impedirán el vaciado de la vejiga urinaria, mientras que una infección puede manifestar irritación y dolor.
Entre los signos clínicos de los problemas de vejiga destaca la dificultad para orinar, que hace que el perro lo intente a menudo sin éxito o con micciones de poca cantidad. También puede observarse el abdomen distendido, manifestar dolor y, en los casos más graves, perder el apetito ó vomitar.
Para tratar los problemas de vejiga, a veces se le coloca un catéter al perro para vaciar la vejiga mientras el veterinario investiga la causa del problema. Un obstrucción completa del tracto urinario puede resultar fatal porque imposibilita al perro la micción. El veterinario evaluará el caso y decidirá el tratamiento más adecuado, en el cual puede incluír un cambio de alimentación para ayudar en dicho tratamiento.
El tracto urinario es fundamental para que el perro pueda deshacerse de las toxinas, por lo que es muy importante que contactes con tu veterinario si observas alguno de los signos clínicos que aquí se describen. El veterinario podrá determinar la causa y ayudarte a darle el mejor cuidado posible a tu mascota.
Publicado en Royal Canin
