Las garrapatas son parásitos chupadores de sangre distribuidos casi por todo el mundo. Se han descrito aproximadamente 850 especies de garrapata. La familia Ixodidae es, con mucho, la mayor y más importante desde el punto de vista económico. Incluye a 13 géneros y aproximadamente 650 especies. Las especies de garrapata dura más importantes en Europa que se alimentan de animales de compañía incluyen: Ixodes spp. (Ixodes ricinus), Rhipicephalus spp. (Rhipicephalus sanguineus), Dermacentor spp. (Dermacentor reticulatus)
Todas las fases activas del ciclo vital de las garrapatas requieren sangre como fuente de nutrientes y, en el caso de las adultas, para la producción de huevos o esperma.
Son parásitos de ocho patas: parientes de los arácnidos, de los ácaros del polvo y de los de la sarna. Poseen una cabeza pequeña, pero con potentes mandíbulas para agarrarse al hospedador. Su cuerpo se va hinchando al llenarse de la sangre que chupa de nuestra mascota.
Su ciclo de vida incluye los estadios de huevo y larva, estas tienen solo seis patas y con ellas se suben a las plantas y esperan tranquilamente, incluso durante años, a que pase su "anfitrión", para saltarle encima. Se alimenta de él y se deja caer para mudar al siguiente estadio, la ninfa, que ya tiene ocho patas. Entonces repite el proceso, se sube a un hospedador y se alimenta para dejarse caer y mudar a adulto. Cuando el adulto consigue un animal, se sube a él y, además de alimentarse, tratará de aparearse. A veces, vemos una garrapata grande y otra más pequeña pegada (pueden ser varias pequeñas en torno a una grande). No se trata de su hija, sino de una garrapata macho con la que copula. La hembra se dejará caer una vez repleta de sangre, pondrá miles de huevos (hasta 20.000) y morirá.
Es cierto que algunos años habrá más garrapatas que otros, según las condiciones climáticas sean más o menos favorables
La garrapata de por sí es ya un molesto compañero, pero además puede transmitir graves enfermedades, como la piroplasmosis, la enfermedad de Lyme, la hepatozoonosis, y otras, algunas de las cuales son zoonosis, es decir, se transmiten al ser humano. Estas patologías pueden incluso producir la muerte del animal. Todos sabemos que en nuestra zona “La bureba” tenemos una gran incidencias de “Babesiosis canina” enfermedad de extrema gravedad que puede acabar con la vida de nuestra mascota en muy pocos días. Por este motivo es importante prevenir la infestación por garrapatas y, si ésta se produce, informar al veterinario en caso de tener que acudir a él.
Por lo expuesto anteriormente es necesario adoptar medidas preventivas para evitar que éstos parásitos se hospeden en nuestras mascotas. Para ello tenemos diversas opciones, como collares, pipetas, sprays, etc.
Si, a pesar de todo localizamos una garrapata en nuestra mascota, nunca debemos de tirar de ella para arrancarla, sino que previamente debemos "anestesiarla", con un insecticida, alcohol, acetona, para que suelte sus mandíbulas y evitar que se rompa la cabeza y si quede dentro de la piel podría que producir nódulos con pérdida de pelo e infecciones y necrosis de la piel afectada.