Resumen Histórico.
Grabados rupestres en épocas neolíticas en el Sureste español esbozan siluetas de animales identificados claramente como podencos y, posteriormente, en época íbera numerosos fragmentos de artesanía, ya muestran un tipo de perro podenco de semejanza con el Xarnego actual. Es curioso que todos los territorios ocupados por las tribus del pueblo íbero coinciden prácticamente con la zona que ocupa la raza desde tiempos inmemoriales hasta la actualidad.



La invasión romana posterior deja multitud de muestras con representaciones artísticas (escultura, pintura, mosaicos...) de podencos cazando muy semejantes al nuestro a lo largo de todo el Mediterráneo, eje vertebral de su imperio.
Romanos después, pero antes muy posiblemente fenicios y griegos, sirvieron para que el trasiego de nuestro tronco racial de podencos autóctonos se difundiese en una más que probable ruta occidente-oriente. Así participó en la formación de otras castas de perros circummediterráneos de orejas enhiestas.


El Xarnego también conocido como podenco valenciano o “gos coniller”, posiblemente sea el más antiguo de los perros podencos peninsulares. La raza fue reconocida por la Real Sociedad Canina Española en 2017, gracias al empeño del club de caza “Amics del xarnego valencià”, por lo que hoy en día es tan conocida. En su libro “Estudio etnológico del perro podenco valenciano”, se recogen estudios genéticos que demuestran las diferencias entre el xarnego valenciano y las otras razas de podenco, y también reúne fotografías y documentos bibliográficos que corroboran su presencia desde hace más de 100 años, no solo cazando, sino también realizando labores de guarda y pastoreo.
Características
El xarnego valenciano es de tamaño mediano y apariencia robusta y ágil. Su pelo puede ser tanto corto, como duro o sedeño. Aunque el rojo es el color de pelaje más representativo, también existen ejemplares de color negro y chocolate, combinado frecuentemente con motas blancas. Con un peso aproximado de 20kg, se distingue de las otras variedades de podenco por sus orejas altas, puntiagudas y su hocico alargado.
Además de ser excelentes rastreadores, estos perros están dotados de gran inteligencia y nobleza. Otra peculiaridad del podenco valenciano es su resistencia a las altas temperaturas y su predisposición natural a no contraer leishmania, una enfermedad muy común en la zona mediterránea.


Actualmente, cada vez más aficionados a la caza cuentan con estos perros como compañeros de afición. Luis Guerrero, criador de xarnego valenciano, destaca que la labor de cría y control es primordial para asegurar el buen desarrollo de la raza, perpetuarla en el tiempo y conseguir, de esta forma, mantener los estándares. Guerrero cuenta con un grupo de 20 ejemplares, todos ellos xarnegos valencianos: “El vínculo que se establece con estos perros es inexplicable. Además de compañeros de trabajo lo son de vida”.“Actualmente, el xarnego valenciano es la raza canina más representada en la Comunitat. En los últimos años ha aumentado notablemente el número de ejemplares, sobre todo de los “polseguers”, como se conoce popularmente a los xarnegos de pelo sedeño”