
Entre los conceptos que definen mucho de valor en la canofilia (tan es así que en muchos casos hay siglos de historia en ello); es la TIPICIDAD y ¿Que es eso?
Esta refiere a los ejemplares que guardan una profunda congruencia fenotipica para con su estándar racial: morfología, metabolismo, conducta y temperamento, y/o función, dicho de una manera más sencilla: el perro luce, se ve, como debe de verse la raza a la luz del estándar, no de nuestras preferencias, gustos o intereses personales, cualesquiera que estos sean. A esto se refiere la canofilia ¿O estamos mal? De ser así, nos gustaría conocer los fundamentos de dicho error.

Una parte de la importancia de ello es preservar las características únicas que a lo largo de décadas de selección artificial han logrado los criadores morfologícas y funcionales; la otra y que no alcanzamos a ver, es que la vulneración de líneas de una raza mediante mestizaje, va a dejar huellas permanentes más allá del rasgo único que se pretende ingresar: desórdenes genéticos por ejemplo (el caso del Bulldog Francés "Bigrope" que ha heredado una mutación del gen HS2 (Haluronano sintasa 2) la cual se vinculan directamente al engrosamiento de la piel, y con el tiempo produce fiebres severas, herencia directa del Sharpei). Rasgos no deseados (orejas o cola atípicas, cuerpo menos voluminoso, huesos más delgados, alturas que superan por mucho lo propuesto por el estándar).

Estos eventos alejan la arquitectura genómica del ejemplar o línea de los componentes raciales de su fin, y si, es muy difícil el regreso al 100% a la raza debido a la integración parcial de dos pozas genéticas diferentes, de tal forma que en esa línea eventualmente estarán emergiendo características pertenecientes a la raza que queremos borrar. Nada se fija y nada desaparece.
La crianza construida a gusto personal creará heterogeneidad morfologíca, metabólica y funcional, sobre todo si hay mestizaje ingresara diversidad genética (si, esto es salud genética, pero una considerable distancia de la tipicidad). Este tipo de crianza crea organismos con apenas ciertos rasgos verdaderamente congruentes con los lineamientos raciales, y poca congruencia entre ellos ya que dispara la varianza en tallas y formas (¿Les suena?). ¿De que sirve una "raza" en donde no hay tipicidad y en consecuencia no se puede lograr homogeneidad en la descendencia?.
La tipicidad es la tarjeta de presentación del ejemplar, amén de su registro, salud o pruebas de laboratorio; es el estandarte de lo que decimos que tenemos y estamos criando.
Vale la pena voltear y mirar con criterio, objetividad, sensatez, y sinceridad a los ejemplares que estamos criando y ver si es lo que uno dice que es.
Un perro de talla chica con orejas erguidas y sin cola (a veces cortadas, debido al mestizaje reciente hay [y habrá] rasgos atípicos en las generaciones subsecuentes) no es un bulldog francés; un perro mediano, gordo, chato y con oteoctomía no es un american bully; un perro flaco sin pelo no es necesariamente un Xoloitzcuintle (el gen FOXI3 que al expresar despoja a los perros de su manto es dominante, en una sola cruza salen perros sin pelo sin ser necesariamente Xolos) .... Y así hay muchos casos, y es pertinente entender que 2 o 3 características vistas en un perro no lo hacen parte de la raza, por más que "nuestro gusto personal" nos lo grite.
De haberse construido la canofilia sustentada en gustos personales, no existirían las razas establecidas, a pesar de las carencias o virtudes de los estándares raciales, es como se ha tejido la Historia, nos guste o no. No podemos integrar a cualquier perro a una raza solo porque pensamos o creemos que es así, porque existen implicaciones genéticas, poblacionales, genómicas, raciales y por supuesto morfológicas.
Ahora mira lo que crías ¿Tiene tipicidad?