HOLA AMIGOS


Bienvenidos a mi blog. Este será un sitio dedicado a la raza que me apasiona, el cocker spaniel ingles, y en general a todos los perros, con raza o sin ella. Aquí iré colgando temas relacionados con ellos, con los cocker y todo aquello que me parezca interesante, sobre veterinaria, etología etc...

Encontrarás que algunos artículos sobre el cocker son un poco técnicos, pero la mayoría son para todos los públicos. ¡No te desanimes !



Agradecimiento:

Me gustaría agradecer a todas las personas que nos han ayudado, explicado y aguantado tantas y tantas cosas, y que han hecho que nuestra afición persista.

En especial a Pablo Termes, que nos abrió su casa de par en par y nos regaló jugosas tardes en su porche contando innumerables “batallitas de perros”. Suyas fueron nuestras dos primeras perras y suya es buena parte de culpa de nuestra afición. A Antonio Plaza y Alicia, también por su hospitalidad, su cercanía, y su inestimable ayuda cada vez que la hemos necesitado. También por dejarnos usar sus sementales, casi nada. Y a todos los criadores y propietarios que en algún momento, o en muchos, han respondido a nuestras dudas con amabilidad.

Y, por supuesto, a Rambo, Cibeles y Maripepa, a Chulapa y Chulapita, y a Trufa, como no, y a todos los perros con pedigrí o sin el, con raza o sin ella por ser tan geniales.

Muchas gracias


Te estaré muy agradecido si después me dejas tus impresiones en forma de comentario.

Espero que te guste y que vuelvas pronto.



PARA LA REALIZACIÓN DE ESTE BLOG NINGÚN ANIMAL FUE MALTRATADO




jueves, 22 de mayo de 2025

EL MEJOR AMIGO DE LA MUJER

Investigadores de la Universidad Eötvös Loránd, Budapest, aseguran que los seres humanos somos capaces de entender lo que los perros intentan comunicar cuando ladran o gruñen ante determinada situación y sugieren que las mujeres somos mejores que los hombres en esta tarea. El estudio, dirigido por el Dr. Tamás Faragó, se publicó en el Royal Society Open Science y es el primero en profundizar en el tema de los gruñidos. Según los expertos, si el contexto es serio, los perros expresan sus emociones con total honestidad. Pero si no se sienten muy seguros o están jugando, puede que intenten manipular un poco.

Para la investigación, el equipo de Faragó registró la respuesta vocal de 18 perros al proteger su comida de otros perros, jugar a tirar de la cuerda con su humano y sentirse amenazado por la presencia de un extraño, tres situaciones concretas en las que un perro puede experimentar diferentes emociones. Los investigadores utilizaron cinco categorías: agresión, miedo, desesperación, felicidad y juego. Luego pidieron a los 40 voluntarios participantes que escucharan las grabaciones y calificaran los sonidos. Las mujeres obtuvieron más aciertos.

La explicación, según los investigadores, es que las mujeres somos en términos generales más empáticas que los hombres y por lo tanto más sensibles a las emociones de los demás, incluyendo a las otras especies, lo que nos permite asociar mejor el contexto con el contenido emocional de la expresión vocal, un patrón común en los estudios de reconocimiento de emociones. Otros estudios sobre empatía cognitiva aseguran que si las mujeres somos capaces de interpretar lo que sucede en la cabeza del otro con mayor facilidad es porque somos “genéticamente más empáticas”. El típico cliché de comedia romántica en el que la chica le dice al chico frases como: “No me escuchas cuando hablo” o “hablar contigo es como hablar con una pared” tiene, después de todo, un respaldo científico. Lo curioso es que si los perros hablaran probablemente se quejarían de lo  mismo.

Por otra parte, según el estudio de Faragó la experiencia también es un factor relevante. Los voluntarios que tenían perros, o que alguna vez habían tenido, acertaron con mayor facilidad la emoción detrás de cada gruñido o ladrido. Sobre este tema, los investigadores concluyen: «Nuestros hallazgos enfatizan que aunque las emociones pueden tener codificación acústica común, el desciframiento de la información contextual del comportamiento vocal de otra especie también implica aprendizaje. Este fenómeno ya se ha visto en el caso de evaluar las emociones en especies con diferentes niveles de familiaridad con humanos oyentes, pero ahora también encontramos evidencia de ello en tipos menos comunes de vocalizaciones de perros”.

Aunque no se trata de un estudio grande, es especialmente relevante porque además de establecer diferencias entre hombres y mujeres a la hora de comunicarnos con otra especie, es de los primeros en demostrar que los seres humanos somos capaces de reconocer diferentes tipos de gruñidos. Investigaciones anteriores han estudiado en profundidad los ladridos, pero el sistema de comunicación vocal de los perros va mucho más allá, así que todavía queda mucho por descubrir.




Publicado en TheObjective