Los orígenes de las veletas se remontan a la antigüedad. Los antiguos griegos construyeron 48 v. BC en Atenas la "Torre de los vientos", de 12 m de altura, fue la primera estación meteorológica, por así decirlo.
La turbina de viento era un demonio parecido a un pez usando un palo para apuntar la dirección del viento.
Las veletas, como las vemos hoy, comenzaron a ser populares en la Edad Media. Durante este tiempo, a menudo estaban hechos de hierro u otros metales y a menudo se instalaban en iglesias y monasterios. Los motivos iban desde símbolos religiosos hasta figuras animales o escudo de armas.
La función principal de una veleta es indicar la dirección del viento. Esto era especialmente importante para la agricultura, ya que los agricultores dependían del clima para planificar su trabajo de campo. También ayudaron con la navegación de la gente de mar y a menudo se instalaban en los barcos.
Con el tiempo, los diseños evolucionaron y se convirtieron en expresiones de diferentes culturas y regiones que desarrollaron sus propios motivos para sus veletas.
Y les pregunto: ¿Qué símbolo se presenta mejor que los galgos, donde todo se trata del viento aquí?
Aunque las veletas han perdido en gran medida su significado práctico original, siguen siendo elementos decorativos populares para los edificios de hoy en día.