Historia del Bengala
Una raza híbrida, creada cruzando el gato leopardo asiático (Prionailurus bengalensis) con el gato doméstico.
Japón es el primer país en recibir a los Bengals como gatos familiares en la década de 1940.
Los Bengals son reconocidos como una raza por la Asociación Internacional de Gatos (TICA) siempre y cuando los gatos sean al menos descendientes de cuarta generación del cruce entre gato leopardo asiático salvaje y gato doméstico. Sin embargo, la Asociación de Criadores de Gatos no acepta al Bengala como raza para la competencia en exposiciones.
Prionailurus bengalensis
Con la apariencia de "leopardo mascota", el Bengala está subiendo en las listas de popularidad, ocupando el primer lugar en TICA, muy por delante del subcampeón Ragdoll. Más de 60,000 Bengalas están registrados en TICA.
La Sociedad Internacional de Gatos de Bengala y TICA trabajan arduamente para mantener la apariencia "salvaje" del Bengala con una personalidad "dócil".
Comportamiento del Bengala
Muy activo y lleno de energía.
Extremadamente alerta y atento. Observan y aprenden de la gente sobre cómo abrir puertas y armarios y otros comportamientos.
Mire hacia arriba porque a la mayoría de los Bengalas les encanta inspeccionar su entorno en los estantes altos y la parte superior de los refrigeradores.
Muy exigente. Quieren y necesitan interacción con personas y mascotas en el hogar.
Potencial temperamento desafiante. Los dueños de gatos experimentados pueden canalizar la energía y la inteligencia de Bengala en juegos productivos y comandos básicos de obediencia.
Tenga en cuenta que algunos Bengalas emiten gruñidos cuando comen.
Aspecto del Bengala
Aspecto del Bengala
Cuerpo musculoso y elegante.
Aspecto salvaje y exótico, luciendo 13 capas de diferentes colores, que incluyen atigrado marrón y punta de lince de foca. Los patrones del pelaje están manchados o veteados.
Cabeza en forma de cuña, ojos almendrados, nariz ancha, mentón fuerte y orejas redondeadas.
Caminata distintiva de "merodeo" debido al hecho de que las patas traseras del Bengala son un poco más largas que las delanteras.
Los bengalíes crecen lentamente, demorando hasta dos años antes de alcanzar la madurez física.
Aseo de los gatos de Bengala
El pelaje es de corto a mediano y ofrece una sensación sedosa.
Desprendimiento medio
Necesidades nutricionales sugeridas para Bengala
Su alto nivel de actividad les permite quemar el exceso de calorías y mantener un peso saludable.
Datos curiosos de los Bengalas
Un verdadero gato ladrón, a los Bengalas les gusta robar objetos domésticos brillantes y esconderlos.
Los Bengalas se encuentran entre las razas de gatos más caras. Un Bengala con calidad de espectáculo puede costar alrededor de $2,000.
A los bengalíes les encanta ir a buscar, jugar en cuencos de agua y caminar con correas.
Hay que tener en cuenta que para que un gato de bengala pertenezca realmente a esta raza, debe tratarse de una cuarta generación. Es decir, han debido pasar tres cruces anteriores con gatos domésticos que garanticen que los cachorros serán también domésticos y sociables.
Los primeros machos que surgieron del cruce del gato doméstico con el gato leopardo fueron estériles, lo que auguraba un mal futuro a la raza. Sin embargo, después de los siguientes cruces de la hembra con otros gatos domésticos, los machos fueron fértiles, de modo que se siguió desarrollando y evolucionando hasta la actualidad.
Los primeros machos que surgieron del cruce del gato doméstico con el gato leopardo fueron estériles, lo que auguraba un mal futuro a la raza. Sin embargo, después de los siguientes cruces de la hembra con otros gatos domésticos, los machos fueron fértiles, de modo que se siguió desarrollando y evolucionando hasta la actualidad.
Es una raza tan actual que, hasta el año 1985, no fue cuando realmente se presentó como tal ante todo el mundo. Previamente había sido reconocida en algunos lugares, pero todavía faltaba el reconocimiento de las asociaciones oficiales.
Existe una variedad de gato bengala muy poco común, llamada bengala snow, de color blanco, que se originó mediante el cruce de el gato leopardo de Asia y el gato siamés. No obstante, es muy poco frecuente encontrar ejemplares con el manto blanco.
El maullido del gato bengalí es muy peculiar. En ocasiones será dulce y suave como el de un gatito casero cualquiera, pero también puede ser que muestre un maullido profundo y grave, que recordará mucho más a un animal salvaje. Un indicativo de su estado de ánimo que vale la pena tener en cuenta.
