¿Por qué mi perro tiene sarro?
El origen del sarro está en la acumulación de bacterias, gérmenes y restos de comida, que forman una capa que se adhiere a la dentadura (placa dental).
Los antepasados de nuestros perros, que vivían en libertad y necesitaban cazar sus presas, no tenían problemas de sarro, pues masticaban tanto carne como huesos, tendones o plumas y, de forma natural, limpiaban sus dientes a diario.
Hoy nuestras mascotas tienen una alimentación más equilibrada y enriquecida que, sin embargo, no aporta el suficiente ejercicio de rozamiento y fricción para mantener sus dientes limpios.
¿Cómo prevenir la aparición de sarro?
Principalmente podemos evitar la aparición de sarro y placa dental en la dentadura del perro incorporando dos rutinas en su vida cotidiana:
Proporcionándole juguetes y snacks que le ayuden a crear fricción en su dentadura. De esta forma, casi sin darnos cuenta, nuestra mascota mantendrá limpios sus dientes sin esfuerzo ni molestias.
Acostumbrándole desde pequeño al cepillado dental. Para ello utilizaremos cepillos y pasta especiales para mascotas e intentaremos cepillarlo tras cada comida. Si no fuese posible, intentar hacerlo en días alternos.
Tu perro no se negará a utilizar juguetes o a disfrutar de snacks, pero el cepillado puede convertirse en caballo de batalla. Si es así, pueden utilizarse métodos alternativos como geles especiales que, aplicados en la dentadura y encías, previenen la acumulación de bacterias y, en consecuencia, la formación de placa. Tu veterinario puede aconsejarte al respecto.
Mi perro tiene sarro ¿qué puedo hacer?
Si el perro tiene sarro visible, es recomendable acudir cuanto antes al veterinario. De esta forma evitarás consecuencias que puedan deteriorar su salud.
El veterinario evaluará a tu mascota y te ofrecerá un diagnóstico, aconsejándote sobre la mejor forma de intervenir.
Es habitual realizar una limpieza bajo anestesia, procediendo a retirar el sarro acumulado en dentadura.
Si, además, existen daños mayores (infecciones, sangrado…), es probable que tu veterinario recete fármacos o antibióticos a tu perro.
La cirugía oral también puede ser necesaria en casos en los que exista enfermedad avanzada y el estado de la dentadura sea muy delicado.
En cualquier caso, recuerda que nadie mejor que tu veterinario puede aconsejarte y orientarte. Acude siempre a tu veterinario más cercano ante cualquier duda, él trabaja por y para la salud de tu perro.