La explosión en la central nuclear de Chernóbil en Ucrania en 1986. También el escape de gas en la central nuclear por el terremoto de Fukushima en Japón en 2011, aunque menor, es considerado junto con el accidente de Chernóbil los desastres nucleares más grandes de la historia.
Los compuestos radiactivos liberados al ambiente tras un escape nuclear, perjudican enormemente a la fauna silvestre y a los animales domésticos, como los perros.
¿Cómo afecta la radiación nuclear a los animales?
La radiación nuclear es un tipo de radiación ionizante que en determinados umbrales resulta muy perjudicial para las células y tejidos animales.
La radiación ionizante produce daños como:
Problemas en la reproducción: el sistema reproductor es el más sensible a la radiación.
Cáncer: aumento en la probabilidad de desarrollar cáncer.
Deficiencias metabólicas: compuestos liberados en los escapes nucleares, como el yodo-131, afectan al correcto funcionamiento de la glándula tiroides.
Inmunosupresión: la radiación reduce la cantidad de linfocitos.
Infecciones de sangre: la radiación reduce leucocitos y plaquetas.
Neumonías: la radiación produce daños en la barrera alveolar.
Cataratas: produce daños en la maduración del cristalino.
Encefalopatías: produce daños en las vainas de mielina de las células nerviosas y también daño vascular.
¿De dónde vienen los perros de Chernóbil?
En 2017 nació un grupo de estudio de los perros de Chernóbil como respuesta al aumento de la población de perros ferales en la zona donde ocurrió la tragedia. Esta zona que se conoce como zona de exclusión, tiene una extensión de 2600 km2.
Durante dos años se proporcionó a los perros callejeros de Chernóbil, cuidados veterinarios. Además se les tomaron muestras de sangre para analizar su ADN.
Tasa de mutación y diversidad genética en animales
Las mutaciones ocurren en la naturaleza de manera espontánea y son un mecanismo natural que aumenta la diversidad genética de las poblaciones. La velocidad a la que ocurren estas mutaciones se llama tasa de mutación.
Los compuestos expulsados al medio ambiente como consecuencia de accidentes nucleares como Chernóbil, pueden aumentar la tasa de mutación. Una tasa de mutación alta puede resultar en problemas de salud, como la aparición de ciertas enfermedades como el cáncer.
Por el contrario, cuando la radiación genera problemas de fertilidad, la diversidad genética podría verse reducida al disminuir el número de individuos reproductores.
¿Cómo es la estructura genética de los perros de Chernóbil?
Se ha secuenciado el ADN de 302 perros ucranianos de tres zonas de Chernóbil:
Dentro de la central eléctrica.
A 15 kilómetros del lugar del desastre.
A 45 kilómetros del lugar del desastre.
Existe suficiente diferenciación genética para afirmar que los individuos de la central eléctrica y la ciudad de Chernóbil son genéticamente distintos. Esto implica dos poblaciones diferentes.
¿Ha mutado el ADN de los perros de Chernóbil a consecuencia de la radiación?
Los autores del estudio apuntan a que las poblaciones de Chernóbil tienen una firma genómica única y proponen que estas poblaciones son ideales para estudiar e identificar loci genómicos asociados con la exposición a la radiación a largo plazo.
Sin embargo, otros expertos afirman que el factor que más ha afectado a la estructura poblacional de los perros de Chernóbil no es la radiación, sino la ausencia del ser humano. Los perros de Chernóbil llevarían más de 30 años aislados, reproduciéndose entre ellos y sin el aporte de genes de otras razas domésticas. Esta sería la causa de las diferencias encontradas entre los perros callejeros de Chernóbil o otros perros callejeros de otro lugar.
Dudan por tanto, del uso de estos perros como modelo de afección de la radiación nuclear en el genoma. Además añaden que:
En Chernóbil actualmente la radiación es similar a la de cualquier otro lugar. Solamente un 1% de toda Chernóbil son zonas de radiación alta y peligrosa. Estas zonas están parcheadas alrededor del complejo nuclear.
Un perro que se está moviendo nunca está expuesto las 24 horas del día a alta radiación.
El trabajo no incluye ninguna medida de la radiación, solo estudia la diversidad genética de los perros en distintas zonas de Chernóbil.
Referencias:
Nagasawa, M. et al. 2012. Continued distress among abandoned dogs in Fukushima. Sci. Rep. 2, 724.
Spatola, G. J.et al. 2023. The dogs of Chernobyl: Demographic insights into populations inhabiting the nuclear exclusion zone. Science Advances, 9(9), eade2537.