Es posible que no todos los perros están preparados para recorrer grandes distancias por la montaña o el campo, especialmente los perros que viven en las ciudades, y posiblemente no realicen actividad física intensa a diario.
Es importante estar seguros del óptimo estado de salud de nuestro perro, y antes de salir al campo revisar sus almohadillas plantares, para que no se resientan al caminar prolongadamente sobre terrenos en los que, posiblemente, no esté acostumbrado.
Seamos conscientes que, aunque nuestro amigo nos seguiría al fin del mundo, debemos prestar atención a cualquier signo de cansancio o agotamiento para ofrecerle un descanso, y adecuar el ejercicio a su estado fisiológico, morfología y edad.
2. A tu perro no le puede faltar el agua si va de excursión a la montaña
Aunque recorráis la montaña en las estaciones menos cálidas del año es esencial asegurarse de que el perro bebe el agua que necesita durante la jornada, ofrécesela cada treinta o cuarenta minutos o siempre que observes que tiene sed; eso sí, la ingesta de agua debe hacerse poco a poco, sin que ingiera un gran volumen de golpe, ya que la ingesta brusca de agua fría tras el ejercicio intenso puede desencadenar problemas de índole digestivo como la temida torsión de estómago.
Procura que solo beba el agua que lleves para él y si bebe de algún manantial o río asegúrate de que es limpia y potable, no le dejes beber en aguas estancadas o que no te ofrezcan seguridad, para evitarle infecciones gastrointestinales o parasitosis internas. Existen en el mercado botellas, termos y envases especiales para transportar cómodamente el agua de tu perro mientras camináis.
Es aconsejable conocer el lugar en el se va a pasar el día o los días, y saber algunos datos importantes como si está permitido que el perro camine por la montaña suelto de una forma segura o es necesario llevarle controlado con su correa; también es interesante saber si existen alojamientos o establecimientos que acepten mascotas, si se puede acampar, o si hay alguna clínica veterinaria cerca, por ejemplo.
Nunca hay que dejar al perro encerrado en el coche y para colaborar con el mantenimiento del medio ambiente, siempre se deben recoger recoger sus excrementos.
4. Es importante llevar esto si vas de excursión con tu perro
– Su cartilla veterinaria y su documentación en regla.
– La cantidad suficiente de su pienso habitual, si vas a pasar horas fuera de casa.
– El agua que habitualmente beba o agua mineral.
-Sus boles de comida y bebida (existen especiales para viaje, que se pueden plegar y son muy cómodos),
-Una esterilla o colchoneta si tienes previsto hacer noche fuera de casa.
5. Prepara un botiquín para tu perro si vas de excursión a la montaña
Antes de salir de excursión, consulta con tu veterinario la preparación de un pequeño botiquín `de emergencia´, por si tuvieras que utilizarlo: te puede recomendar llevar un termómetro, algún medicamento por si sufre alguna picadura de insectos, vendas, gasas, guantes, esparadrapo, unas tijeras y algún medicamento para el dolor, reacciones alérgicas o para la diarrea.