A menudo comparado con el Dachshund o el Basset debido a sus patas cortas, el Munchkin es una raza de gato bastante reciente. Sin embargo, está luchando por hacerse popular, ya que su número es reducido y algunas instituciones felinas aún se resisten a su reconocimiento. Pese a todo, todo aquel que tiene o ha tenido un Munchkin coincide en que se trata de un compañero de calidad, tan agradable de criar como de observar en el día a día. Activo a pesar de su particular físico, juguetón y curioso, también demuestra su temperamento tierno y amigable con todos los miembros de su familia, incluidos otros animales.
Historia de la raza
Oficialmente, el Munchkin se originó en Estados Unidos, pero según una investigación de Sandra Hochenedel, la mujer que adoptó el gato callejero a partir del cual se desarrolló la raza, existen descripciones de gatos similares que datan de los años 1940 en Alemania.
La profesora de música Sandra Hochenedel descubrió, en 1983, una gata preñada de patas cortas, escondida debajo de un camión en Rayville, Luisiana. Lo coleccionó y lo llamó Blackberry. La mitad de los gatitos que parió tenían las mismas características físicas que ella. Su amante los envió al Dr. Solfeig Pfleuger, un genetista de Springfield, Massachusetts, quien los examinó incluyendo radiografías. Estos no revelaron ninguna deformación articular o ósea. De hecho, los cuerpos de patas cortas de estos gatos se debían a una mutación genética espontánea.
Después de una extensa investigación, Sandra Hochenedel pudo encontrar los escritos de un veterinario alemán que, en 1944, describió un felino bastante similar y al que llamó “gato canguro”. Por lo tanto, creía que el Munchkin existía al menos desde entonces, pero que la raza estaba al borde de la extinción al final de la Segunda Guerra Mundial.
El Munchkin se exhibió por primera vez en el Madison Square Garden de Nueva York en 1991. Unos años más tarde, un artículo del New York Times dedicado a la raza mostraba cómo las opiniones todavía estaban muy divididas sobre el tema. El artículo mencionaba la Exposición Internacional de Gatos de 1995, la organizadora del evento Vicky Markstein dijo que "amaba" a este recién llegado al mundo felino, mientras que Katherine Crawford, jueza de la Asociación Internacional de Exposiciones de Gatos, dijo que estaba "horrorizada" por esta "alteración del gato".
En Francia, fue en 1993 cuando llegó el Munchkin a través de Bobby, un macho blanco y negro importado de Estados Unidos por Aline y Philippe Noël. El número de ejemplares de la raza sigue siendo relativamente pequeño hoy en día, tanto en Francia como en el resto del mundo.
La raza está reconocida por la Asociación Internacional del Gato y el LOOF (Libro Oficial de Orígenes Felinos), pero no por la Federación Internacional del Gato por ejemplo, siendo esta última una de las instituciones que considera que la particularidad del Munchkin (las patas cortas) es una tara.
Particularidades físicas
Cuerpo: de tamaño rectangular, de tamaño mediano a grande. Los músculos y huesos están bien desarrollados. Las patas cortas son su principal característica. Son robustos y rectos, los pies son de forma redonda y de mayor tamaño en los machos. El cuello es de tamaño mediano y bien musculoso.
Pelo: corto o medio largo. En la variedad de pelo corto, el pelaje es de densidad media y el subpelo moderado. En las personas con pelo medio largo, el pelo es más denso a la altura de los calzones.
Color: se aceptan todos los colores y combinaciones.
Cabeza: de forma triangular con contornos redondeados, de mayor tamaño en el macho. La nariz es recta y el hocico bien definido.
Ojos: medianos a grandes, con forma de nuez, dispuestos en ángulo. Se permiten todos los colores siempre que sean muy brillantes e intensos.
Orejas: de tamaño mediano, anchas en su inserción, bien separadas y ligeramente redondeadas en sus puntas.
Cola: gruesa en su inserción, volviéndose más refinada, moderadamente larga, con el extremo redondeado. El penacho es buscado en la variedad de pelo largo. El puerto es alto y recto cuando el gato camina.
Comportamiento y carácter
La reducida longitud de sus patas no le impide ser un gato activo y vivaz , al que le gusta correr y trepar. Sociable, el Munchkin se lleva tan bien con sus compañeros como con los perros. Con su dueño es cariñoso y juguetón. Su curiosidad y su capacidad de escabullirse le llevan a mirar hasta el último rincón. Este gato es un agradable compañero para toda la familia, incluidos los niños.
Condiciones de vida
El Munchkin es un gato al que le gusta explorar su entorno. No duda en alejarse un poco de casa para descubrir y conocer gente, pero no se queda fuera. Buscará sistemáticamente encontrar la comodidad y seguridad del hogar, con su familia. Por lo tanto, podrá vivir muy bien en un apartamento, aunque lo ideal sería que tuviera un espacio exterior seguro.
El Munchkin también necesita accesorios para entretenerlo, estimularlo y mantenerlo activo, entre ellos el árbol para gatos.
Salud
El Munchkin es un gato bastante robusto y con una salud sólida. Sin embargo, sus cortas piernas probablemente le causarán dificultades, según diversas fuentes, entre ellas la Federación Universitaria para el Bienestar Animal; esto incluye la osteoartritis. También se ha observado lordosis en algunos sujetos. Esta es una condición de la columna, que se curva excesivamente. Por último, es recomendable vacunarlo, como ocurre con todos los gatos, contra las enfermedades habituales como la leucosis, el tifus, la coriza y la rabia.