Convivencia
Muchas
 personas disfrutan de la compañía de una mascota y no tomarían en 
consideración ni por un momento la posibilidad de deshacerse de su perro
 o gato, que a menudo es considerado uno más de la familia. Sin embargo,
 la convivencia entre personas y animales no siempre es un éxito y en 
algunos casos la relación fracasa: solo en España durante el 2010 se han
 recogido alrededor de 109.000 perros y 36.000 gatos. Y si para un 
propietario puede ser difícil tomar la decisión de abandonar a una 
mascota, para el animal, el abandono es el comienzo de un camino muy 
difícil que tiene un final feliz en forma de adopción solo en el 45% de 
los perros y en el 38% de los gatos. El resto de animales deberán seguir
 viviendo en las protectoras, donde el ambiente desconocido, el cambio 
repentino de rutina y el aislamiento de su grupo social pueden suponer 
un fuerte estrés.
Estudio
Pero, ¿por qué tantos perros y 
gatos acaban cada año en refugios y protectoras? Es lícito preguntarlo, 
sobre todo teniendo en cuenta los numerosos beneficios que las mascotas 
aportan al bienestar físico y mental de las personas y la expectativa de
 muchos futuros propietarios de que su perro o gato se convertirá en un 
fiel compañero de vida y en un amigo. Además, la respuesta a esta 
pregunta representa el primer paso para planear medidas que ayuden a 
reducir o erradicar el abandono de los animales de compañía. Con esta 
finalidad, desde 1988, la Fundación Affinity realiza periódicamente un 
estudio que estima la cantidad de animales abandonados en España y que 
analiza el perfil de los animales recogidos, de las personas que los 
llevan a los refugios y de los centros que los recogen.
Motivos
Según
 el último estudio realizado en el 2010, los principales motivos de 
abandono de perros y gatos han sido las camadas inesperadas (14%), los 
cambios de domicilio (13,7%), los factores económicos (13,2%), la 
pérdida de interés por el animal (11,2%) y el comportamiento 
problemático de la mascota (11%), mientras que entre los motivos menos 
frecuentes se encuentran el fin de la temporada de caza (10,2%), las 
alergias de algún miembro de la familia (7,7%), el nacimiento de un hijo
 (6,4%), el ingreso en hospital o la defunción del propietario (3,5%), 
las vacaciones (2,6%) o el miedo a contraer la toxoplasmosis durante el 
embarazo (2,4%).
Incompatibilidad
Estos motivos tienden a 
cambiar en el tiempo y con respecto a los estudios anteriores, los datos
 del 2010 indican un aumento de los factores económicos y una 
disminución de los motivos relacionados con la pérdida de interés, el 
fin de la temporada de caza y el miedo a la toxoplasmosis. Sin embargo, 
el abandono sigue apuntando a una incompatibilidad entre algunos 
propietarios y algunas mascotas, a un desconocimiento sobre las 
implicaciones prácticas de vivir con un animal y en algunos casos a unas
 expectativas equivocadas sobre el comportamiento normal de un perro o 
de un gato.
Sensibilización
Así que estamos lejos todavía 
de erradicar el problema, pero las campañas de sensibilización de la 
población contra el abandono de los animales empiezan a hacer efecto. 
Cada vez hay más personas que intentan elegir la mascota que “encaje” 
mejor en su estilo de vida y que antes de adoptar consultan a los 
profesionales del sector para tener expectativas realistas sobre la 
dedicación que la mascota necesitará en términos de tiempo y dinero.
Consejos
De
 hecho, si estás valorando la posibilidad de adoptar una mascota y 
quieres sentar las bases de una relación larga y feliz, te pueden 
interesar los siguientes consejos elaborados por Fundación Affinity para
 evitar el abandono de animales:
- La decisión de tener un animal se debe tomar en familia, 
repartiendo las diferentes tareas y responsabilidades entre todos los 
miembros de la misma
- Informarnos y decidir qué tipo de animal es el que mejor se adapta a
 nuestras necesidades, gustos, estilo de vida y tamaño del hogar: perro,
 gato, u otro tipo de mascota; macho o hembra; cachorro o adulto; en el 
caso de perros, tamaño pequeño, mediano o grande...
- Enseñar al animal, sobre todo en el caso de los perros, las órdenes 
básicas de adiestramiento. De esta manera, la convivencia será más fácil
 y disfrutaremos mucho más de la compañía de nuestro animal
- Pedir consejo al veterinario acerca de la esterilización para 
ejercer no sólo una tenencia responsable sino también una "paternidad 
responsable", y evitar de esta manera camadas no deseadas