Durante los últimos años he disfrutado tomando fotos de mis dos gatos en casa. Era todo lo que sabía acerca de los gatos además de esas fotos dulces de gatitos felices que se pueden ver casi en cualquier parte de la web.
Pero un día que estaba caminando en un parque me di cuenta de unos gatos caminando alrededor. Inmediatamente me sentí que los estaba siguiendo y se fueron a esconder en un edificio abandonado cercano. Volví al día siguiente y descubrí que esos gatos eran atendidos por un grupo de voluntarios que diariamente les proporcionaban comida y agua fresca. Habían hecho refugios para esos gatos en algunos edificios abandonados para que pudieran tener un lugar cálido y seco donde ir los fríos días de invierno.
Empecé a volver allí muy a menudo y me familiaricé con el mundo de las colonias y los gatos callejeros. Durante casi dos años he estado tomando fotos de estos gatos. Inmediatamente decidí que tenían que estar en blanco y negro porque quería que mi trabajo fuera un documental para aumentar la conciencia sobre los gatos abandonados. No encontrará fotos románticas en este reportaje. No encontrarás gatitos lindos jugando con juguetes coloridos. Pero verás gatos reales viviendo su vida en el mundo real.