El famoso escritor Ernest Hemingway, ganador del Premio Nobel de
literatura en 1954, llegó a tener ás de 50 gatos en su finca de La
Habana.
Hemingway sentía una gran devoción hacia estos animales, incluso cuentan
que dormía con varios de ellos y a cada uno de sus gatos los bautizó
con los nombres más originales como por ejemplo, Mister Feather Puss,
Crazy Christian, etc.
Su primer gato fue un obsequio que le hizo un capitán de barco en la
década de los años 30. Le puso como nombre Snowball (Bola de Nieve). El felino contaba
con mas dedos de lo habitual, tanto en sus patas traseras como
delanteras, una mutación que se conoce como polidactilia.
Los hijos de Snowball nacieron en su casa de Key West, en Florida, y todos contaban con dedos de más.
Junto a Snowball, Ernest Hemingway escribió varios cuentos clásicos,
entre ellos “Por quién doblan las campanas”. Actualmente en esta casa
de Florida hay un museo que se puede visitar, y este lugar, además de
conservar objetos personales del escritor, alberga a más de 60 gatos,
todos descendientes de Snowball y la mayoría de ellos tienen polidactia.
Todos los gatos se encuentran bien alimentados (por la marca
Eukanuba), reciben medicamentos de la marca Pfizer y la mayoría están
castrados, aunque no todos, para continuar con la dinastía. También
reciben visitas veterinarias semanalmente.